Trabajadores del CEMEFIR realizaron un abrazo simbólico a la institución ante el riesgo de cierre
Frente al Palacio Municipal, trabajadores y pacientes del único centro de salud de medicina física y rehabilitación en La Matanza expresaron su rechazo ante el posible remate judicial del inmueble y el cierre del establecimiento.
Ante el posible remate judicial del inmueble y el cierre de la institución, trabajadores del Centro de Medicina Física y Rehabilitación (CEMEFIR) de San Justo realizaron un abrazo simbólico en la Plaza General San Martín, frente al Palacio Municipal. A casi 70 años de su fundación, la institución atraviesa una situación incierta.
Desde 1956, el CEMEFIR es el único centro de este tipo en el Distrito. En las últimas semanas, los trabajadores expresaron su preocupación no solo por sus puestos de trabajo, sino también por el cese en los tratamientos de los pacientes, que se brindan de manera gratuita.
En la institución se desempeñan kinesiólogos, fonoaudiólogos, terapistas ocupacionales, psicólogos, psicopedagogos y trabajadores sociales. No obstante, el remate judicial podría oficializarse en febrero y, aspi, se le daría fin a un espacio que ofrece una función social para miles de matanceros.
“CEMEFIR es un espacio ganado mediante un concurso, donde nosotros trabajamos y los pacientes se atienden hace casi 70 años. Consideramos que nuestro reclamo es más que justo”, explicó Andrea, trabajadora de la institución, en comunicación con Radio Universidad. “Hay pacientes que vienen hasta tres veces por semana a atenderse, con tratamientos que dependen de la patología. Los trabajadores nos involucramos porque nuestra idea es brindarles una mejor calidad de vida. Pedimos por favor que se respete nuestro espacio de trabajo”, agregó.
El conflicto del CEMEFIR
En 2015, la jueza Laura Mato, a cargo del Juzgado de Primera Instancia Civil y Comercial N° 1, declaró el remate de la propiedad donde funciona la institución. No obstante, en 2021 se formalizó la expropiación del CEMEFIR a través de la promulgación de la ley 15.318, algo que hasta ahora nunca se concretó.
Trabajadores del centro destacaron que el precio estimativo del inmueble donde funciona la institución es de “entre dos y cuatro millones de dólares”, aunque la deuda “no supera los 400.000 dólares”. “Nosotros no tenemos una información clara de qué estuvo pasando. Nos enteramos recientemente del remate del edificio: nos tomó por sorpresa porque pensábamos que este tema ya estaba resuelto”, alertó Andrea.
Por último, y en referencia al abrazo simbólico impulsado por los trabajadores y difundido en las redes sociales, indicó que se realizó de manera pacífica. “La idea es que los pacientes puedan dar su testimonio de por qué vienen a CEMEFIR. Queremos que esta situación se solucione lo antes posible”, cerró.