Síntomas, cuidados y prevención social: cómo evitar la epidemia por dengue
Desde Políticas Públicas Saludables e Investigación Epidemiológica de La Matanza enfatizaron en que la solución para combatir la enfermedad “depende de todos”.
Ante la nueva ola de casos de dengue y chikungunya que ataca al país, desde el municipio de La Matanza insistieron en la necesidad de mantener cuidados, precauciones y métodos de prevención para evitar la proliferación y propagación del mosquito Aedes aegypti, transmisor de ambas enfermedades.
El director de Políticas Públicas Saludables e Investigación Epidemiológica de La Matanza, Rubén Carlevaro, resaltó en Radio Universidad que el trabajo de prevención “depende de todos”, por lo cual es fundamental “eliminar los lugares que puedan contener agua”, ya que es allí donde el mosquito hembra deposita los huevos. Estos se desarrollan en tan solo una semana y de un solo insecto pueden nacer alrededor de cien.
El mosquito no es el enfermo, sino el vector. Es decir que el proceso de contagio se da cuando, estando “sano”, pica a una persona enferma y comienza el proceso de transformación, que dura entre cinco y siete días. Entonces, el virus comienza a circular a través del cuerpo del insecto de modo que, cuando pique a otra persona, le transmite la enfermedad.
En este caso, explicó Carlevaro, el caso de gravedad se da cuando el paciente contrajo distintos tipos de enfermedad: “El virus dengue tiene cuatro serotipos distintos. Si una persona contrajo el virus hace algunos años y ahora lo contrae nuevamente, la circulación de otro serotipo provoca en el paciente un cuadro grave porque padece de hemorragias y trastornos sanguíneos que, por lo general, finalizan en terapia intensiva”.
El cuadro del dengue y del chikungunya es “similar al de una gripe”. Según describió el médico infectólogo, “se la denomina fiebre quebrantahuesos debido a la fiebre y el dolor que provoca en el cuerpo, además del dolor de cabeza y retrocular”. Por eso, se sugiere a quien padezca de estos síntomas que “se dirija al centro de salud más cercano” y tome Paracetamol o Dipirona para bajar la fiebre, “pero que no se automedique”.
“Evitemos el ingreso del mosquito a las casas. Siempre que se pueda, tener mosquiteros en las puertas y ventanas; en el caso de los bebés, cubrir las cunas con tules”, recomendó Carlevaro, y recordó, a pesar de esto, que “el número de casos aun no es preocupante” ya que todavía no se alcanzaron las cifras de 2020. De hecho, son 200 los casos en estudio y 35 los confirmados en el Partido. “Esto no significa que debamos relajarnos”, alertó.
