Pintaron estrellas amarillas en San Justo y Villa Luzuriaga por dos víctimas de siniestros viales
Se trata de Lucas Fernández, fallecido el 7 de diciembre de 2021 en Juan Manuel de Rosas al 3.400, y Sabrina Paola Rodríguez, fallecida el 4 de junio de 2022 en Monseñor Marcón y Guido y Spano. El pedido de familiares por una mayor toma de conciencia en la sociedad.
El domingo pasado, familiares de víctimas de siniestros viales, junto a Estrellas Amarillas La Matanza y la asociación civil Unión de Familiares de Víctimas (UFAVIC), pintaron dos estrellas, una en San Justo y la otra en Villa Luzuriaga, por dos personas fallecidas en estos hechos. Se trata de Lucas Fernández, que perdió la vida el 7 de diciembre de 2021 en Juan Manuel de Rosas al 3.400 (esquina Entre Ríos), San Justo, y Sabrina Paola Rodríguez, fallecida el 4 de junio de 2022 en Monseñor Marcón y Guido y Spano, Villa Luzuriaga.
En comunicación con El1 Digital, María Alejandra Suárez de Fernández, mamá de Lucas, recordó: “Él iba a trabajar con su moto por Juan Manuel de Rosas sentido a Capital. Cruzó Entre Ríos, pero, cuando estaba por pasar la puerta del autoservicio ‘Los Primos’, había una Saveiro mal estacionada sobre la avenida. Perdió la visión de la entrada y salida de autos. Para mí tendría que estar señalizada esa salida del mayorista. Una Fiorino estaba queriendo entrar, justo salía otro auto, no se ve en la filmación, y da para atrás para dar lugar. Y cuando da para atrás, mi hijo justo estaba pasando la camioneta mal estacionada, y la Fiorino no lo ve y lo toca. Cuando lo toca, Lucas cae de costado con su moto, con la desgracia de que pasaba un camión por el último carril y las últimas dos ruedas le aplastaron la cabeza”.
“Acá lo malo es que no solo estaba mal estacionada la Saveiro que, por lo que sabemos, tuvo su multa y nada más. La entrada del autoservicio no estaba señalizada con luces y sigue estando así. La Fiorino se escondió dentro del mayorista. En ese momento, al estacionamiento no le funcionaban las cámaras, por lo cual no tenemos la patente de la Fiorino. Se puede ver todo, pero no tenemos la patente, por lo cual la causa penal quedó cerrada porque no tenemos el tercero. Y ahora estamos tratando de que algún seguro se haga cargo, y se tiran la pelota unos a otros”, lamentó.
“Lucas tenía 29 años, era un chico que hacía deportes, trabajaba todo el día, estaba de novio hacía un año. Esta fue una actividad para crear conciencia, para que no le pase a otro chico. Lo hice, primero, para que los chicos que andan en moto tengan cuidado en esa entrada y salida de vehículos, más allá de que el semáforo en esas dos esquinas es peligroso. Segundo, para que la gente no se estacione allí. Y tercero, sobre el dueño de la Fiorino, que debe ser cliente de Los Primos: sé que no lo hizo a propósito, pero, mínimamente, bajate. Se escondió y nunca supimos de él”, acusó.
Por su parte, Olga Rodríguez, hermana de Sabrina Rodríguez, contó a El1 Digital: “Habíamos llevado a los nenes al colegio en moto. Volvíamos a lo de mi mamá. Pasó este muchacho con un (Fiat) 147. Yo iba adelante con mi marido, en mi moto. Mi hermana venía a unos diez o quince metros atrás. Él nos ve, tocamos bocina. Cuando nos ve, vuelve a girar la mirada para el otro lado, sin importarle que veníamos con la moto. Nosotros llegamos a esquivarlo. Mi hermana no llegó a frenar su moto. Le llegó a agarrar la rueda de atrás y es allí cuando le impacta, da vueltas en el aire y cae en el asfalto. El muchacho tenía un auto prestado, no era de él. Se quería ir, y con los vecinos llegamos agarrarlo, lo sentamos y esperamos a que llegue la ambulancia”.
“Cuando llegó la ambulancia ya era tarde, porque mi hermana no respondía. Después falleció. Tenía 29 años y dos hijos. El conductor no estuvo detenido y está libre. El seguro pagó, pero no es nada, porque la vida de mi hermana no se la devuelven. Él sigue en la calle, no sé si sigue manejando, sé que es de Villa Luzuriaga. La persona que le prestó el auto vive a mitad de cuadra de mi casa. Somos todos vecinos”, detalló. “Pido que se haga justicia por todas las víctimas de hechos de tránsito. Muchos chicos murieron en esa esquina, demasiados. Hace falta poner más señalización o colocar lomos de burro en las esquinas peligrosas, porque por allí pasa el 624, y no respetan nada”, señaló.