Biocorredores urbanos: una opción en las ciudades que preserva flora y fauna nativas

El ingeniero agrónomo Gonzalo Pares, del INTA AMBA, explicó en Radio Universidad la importancia de proyectar espacios verdes y la participación de la comunidad en su planificación.

Por Gonzalo Pares*

Todos conocemos las reservas naturales, algunas de ellas aquí en el partido de La Matanza. Son espacios que, de alguna manera, cuidan que la naturaleza autóctona prospere. En tanto, los biocorredores son senderos, caminos o espacios que van conectados a las reservas y donde también prosperan flora y fauna.

Hace poco mantuvimos una reunión en el INTA AMBA con más de 80 técnicos y vecinos de municipios del oeste del Conurbano bonaerense para proyectar y planificar las áreas de reservas urbanas y circuitos de biocorredores. Sin embargo, también somos conscientes de que hay muchos intereses inmobiliarios en los espacios libres de una ciudad.

Por ejemplo, hay humedales ubicados en lugares bajos que fueron eliminados y convertidos en barrios privados. A pesar de esto, como organismo nos alegra que haya cada vez más gente involucrada en querer tener una reserva en su zona y que para ello se reúne y lucha.

Intervención del INTA a favor de los biocorredores

Tanto en los espacios productivos como en las huertas urbanas, nuestra intervención es a favor de demostrar y poner en práctica que tener espacios silvestres beneficia a la producción. Recientemente, hemos elaborado un informe sobre la importancia de los espacios agrestes y cómo el hecho de arrasarlos para los cultivos afecta negativamente en las zonas agrícolas.

Por otra parte, en las zonas más urbanas, nuestro rol puede estar más relacionado a la producción de plantas nativas; aunque, lamentablemente, hay poca producción. En nuestras capacitaciones, enfatizamos la importancia de la flora y la fauna nativas para trabajar sobre los beneficios que aportan en las ciudades.

Hay que reconocer que, para nosotros, todo esto es algo relativamente nuevo, por lo cual el rol que ocuparemos también está en un proceso de discusión interna. Le recomiendo al vecino que se involucre en la generación de estos espacios, ya sean los senderos lineales o las reservas. Es positivo entender que uno puede dejar un rincón silvestre en el parque de su casa, por más pequeño que parezca, porque aún hay mucho por hacer.

*Ingeniero Agrónomo del INTA AMBA