Logro vecinal: habilitaron la nueva entrada vehicular para el barrio Esperanza de Virrey del Pino
Ahora, los vehículos pueden ingresar a la barriada por la calle Cerrillos. Satisfacción de los vecinos que durante más de un año reclamaron accesos vehiculares en medio de la obra de la Autopista Perón.
En las últimas horas, Vialidad Nacional finalizó y habilitó la entrada vehicular al barrio Esperanza de Virrey del Pino, más precisamente por la calle Cerrillos. De esta manera, el organismo nacional cumplió la promesa efectuada a los vecinos, de garantizar entrada y salida a la barriada, ya que este barrio ubicado a la altura del kilómetro 38 de la Ruta Nacional Nº 3 había quedado aislado, “encajonado”, por la megaobra de la Autopista Presidente Perón.
Estas obras fueron posibles, fundamentalmente, a causa del reclamo y la lucha de los vecinos, quienes desde hace más de un año venían reclamando de diferentes maneras a las autoridades para que se modificara el plano original de la Autopista Presidente Perón y se concretaran los trabajos fundamentales para que no quedaran aislados.
Así, esta entrada es clave, por ejemplo, para el ingreso de ambulancias y transporte público al barrio. En comunicación con El1, Rufina, una de las vecinas referentes, expresó el sentir de sus vecinos y recordó los comienzos de la lucha colectiva. “Este viernes se abrió la entrada del barrio, la nueva entrada por la calle Cerrillos. Es hermosa. Pasamos más de un año peleando, tocando puertas, chocando contra paredes. El primer día que fuimos a cortar el ingreso de las máquinas a la obra éramos diez personas. Recuerdo que ese día bajamos, nos juntamos, charlamos sobre qué podíamos hacer, y decidimos pararnos frente a la máquina para que no trabaje. Esa fue nuestra lucha: nos paramos frente a la máquina y no la dejamos trabajar”.
“Así pasaron los días, hasta que bajaron todos, del Municipio, Vialidad, y abrieron la entrada. Desde ahí, entonces, decidimos seguir luchando. Tocamos puertas, fuimos al Concejo Deliberante. Fuimos a la Defensoría del Pueblo, a Vialidad Nacional, a los lugares que donde nos decían ‘vayan que allá hay gente’ ahí íbamos. No nos quedamos. Fue una lucha bastante compleja, hasta que después pudimos abrir la entrada por un tiempo, que se dijo que se iba a abrir y después se iba a arreglar”, desarrolló.
La entrada no está ubicada donde los vecinos hubieran querido, pero de todas formas el logró está allí, palpable. “No pudimos hacer la entrada por donde estaba antes. Ahora la hicieron por Cerrillos. Nos sacaron nuestro monumento histórico del barrio Esperanza, que estaba en la entrada, que todo el mundo conocía y se guiaba por eso”.
“Después, nos mostraban planos que no estaban firmados, que no sabíamos si los iban a hacer. Todo eso pasó en este año y pico. Este viernes abrieron la entrada, así que muchas gracias a El1 por acompañarnos, por dar siempre la información y estar atentos a lo que nos pasaba. Hoy podemos decir que lo logramos, que la lucha valió la pena. Gracias a ustedes por el apoyo”, agradeció la vecina.
Ahora, una sociedad de fomento
Los reclamos conjuntos, la lucha colectiva, comunitaria une a las personas y, a veces, forja amistades que perduran en el tiempo. En este sentido, muy emocionada, Rufina recordó la lucha vivida y adelantó a este medio que un grupo de estos vecinos se unirán en una sociedad de fomento que ayude a concretar otras mejoras para el barrio.
“Éramos vecinos que en ese momento no nos conocíamos. Lo único que hacíamos era llevar a nuestros hijos, ayudar a nuestros nietos, estar en la casa, en nuestros trabajos, en nuestros negocios. De repente empezamos a caminar, a luchar, a ver cómo era la realidad. Porque nos habían enseñado que nosotros nos teníamos que quedar en casa y que ellos lo arreglaban todo. Y cuando empezás a tocar la puerta y a preguntar, te llevás cada chasco, cada portazo, cada bronca, que a veces no sabés cómo actuar. Pero bueno, gracias a Dios pudimos luchar, estar juntos. Tal vez éramos pocos. Pero nos rotábamos, no éramos siempre los mismos. Se incorporaban nuevos vecinos, mientras otros iban a trabajar, a descansar, a hacer sus cosas. Fue algo muy especial”, destacó.
“Y les quería comunicar que nosotros, los vecinos de acá, al conocernos, al luchar, quedó una amistad. Y decidimos hacer una asociación civil: ‘Vecinos del barrio Esperanza’. Esta asociación civil va a tratar de ayudar a los vecinos en sus reclamos. Va a tratar de trabajar con el Municipio de acá de la zona, porque somos los vecinos los que sabemos las necesidades, lo que falta en el barrio y dónde se necesita. Tenemos nuestro número, todavía no nos presentamos, pero ya lo vamos a hacer”, adelantó.