La viralización que logró un reencuentro tan esperado como necesario
Cómo compartir una noticia por redes sociales ayudó a resolver la desaparición de la beba robada del Hospital Paroissien.
El caso de la recién nacida y desaparecida del Hospital Paroissien de Isidro Casanova conmovió a un gran grupo de personas que, tal vez sin saberlo, contribuyeron a lograr el encuentro entre la niña que había sido robada y sus padres. La mañana del sábado 18 de marzo transcurría con normalidad en el centro médico matancero cuando una madre descubrió lo peor: al despertarse, su beba recién nacida no estaba. Aunque creyó que había sido una enfermera, Elizabeth, minutos más tarde, entendió que lo que había pasado era aun más perturbador.
A través de las cámaras de seguridad del hospital, se registró a una mujer que se presentó alrededor de la una de la mañana preguntando por la habitación 210. Al no ser familiar de la niña, no la dejaron ingresar. Sin embargo, eso no la detuvo: volvió a presentarse alrededor de las seis y, esta vez, logró pasar.
Lo único que se sabía, hasta ese momento, era que la mujer había ingresado en la habitación y salió sin nada en los brazos, pero con una mochila. La historia no tardó en hacerse conocer: hombres, mujeres, comunidades, grupos vecinales, portales de noticias, todos, compartieron el suceso en sus redes sociales.
Tal fue el revuelo y la viralización, que la infante fue hallada pasadas las 13 horas de ese mismo sábado en la puerta de la Parroquia San José, también de Isidro Casanova, tras un llamado telefónico anónimo y una foto. Tiempo más tarde, la mujer, junto a su hija, fueron arrestadas y confesaron el crimen: le habían cambiado la ropa a la beba por prendas de varón, le compraron pañales, una mamadera y le dieron leche de supermercado.
Afortunadamente, la recién nacida fue hallada en buen estado de salud y el particular suceso fue resuelto, en gran parte, gracias a la conmoción de las personas que eligieron compartir la noticia para hacerla conocer y conseguir justicia para una familia que nunca dio todo por perdido.