“El Vesubio” se convertirá en el primer Espacio de Memoria de La Matanza
La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y el Mercado Central firmaron un convenio para recordar los hechos ocurridos en el excentro clandestino de detención y tortura (CCDyT) que operó en la localidad de Aldo Bonzi durante la última dictadura cívico-militar. “Esto ocurre luego de muchos años de lucha para convertir este predio, que fue destruido, en un espacio en donde se sepa a las cosas que pasaron”, enfatizaron.
De la edición impresa.
Tras años de lucha y movilización, el excentro clandestino de detención y tortura (CCDyT) “El Vesubio”, que operó entre 1975 y 1978 en Aldo Bonzi, se convertirá en el primer Espacio de Memoria de La Matanza tras la firma de un convenio entre el Mercado Central (dueño del predio) y la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación.
De forma inédita, El1 Digital pudo recorrer el futuro Espacio de Memoria matancero junto a sobrevivientes de ese campo de concentración en el que, se estima, estuvieron cautivas y fueron torturadas 1.500 personas, entre ellas el guionista de historietas Héctor Oesterheld, el escritor Haroldo Conti y el director de cine Raymundo Gleyzer, los tres, desaparecidos.
“La firma fue una celebración muy importante porque ocurre luego de muchos años de lucha para convertir este predio en un espacio donde los compañeros tengan su lugar y donde, de alguna manera, se sepan las cosas que pasaron”, valoró Nieves Kanje, sobreviviente e integrante de la Comisión Vesubio y Puente 12.
En la misma sintonía se manifestó Silvia Saladino, otra sobreviviente: “Por aquí pasaron cientos de compañeros y hoy estamos acá en honor a ellos proyectando este Espacio para la Memoria”.
En la actualidad, comenzó a ponerse en valor el frente del predio. “Se va a hacer un proyecto arqueológico donde se construirán unas cubiertas que protejan todas las excavaciones que se hagan con el fin de producir nuevas pruebas judiciales. También, se va a establecer un circuito de pasarelas alrededor de las “tres casas” y una edificación que será un centro para dar charlas y recibir al público”, explicaron desde la Comisión.
Seguir los mismos pasos
Alejandra Cravello, hija de Ricardo Cravello, desaparecido en el excentro clandestino Puente 12, pidió que ese lugar, que estaba ubicado frente a “El Vesubio”, también sea considerado un Espacio de Memoria. “Es importante para la promoción de derechos humanos para las nuevas generaciones. Hay que recuperar estos espacios, para ser la voz de los que ya no están”, cerró.
“Nunca más debe volver a pasar”
“Los Espacios de Memoria no son lugares para llorar, son lugares para recordar aquello que nunca más debe volver a pasar. Un país sin historia ni memoria no se puede construir como tal. Este es el primer centro destinado a ser Espacio de Memoria en La Matanza, es la lucha y perseverancia de mucha gente, algunos de los cuales hoy ya no están”, enfatizó la presidenta de la APDH local, Beatriz Capdevila.
“Un poco de justicia”
“El protagonismo de este proceso es de quienes estuvieron ilegalmente detenidos en ese lugar y de los familiares. Lo nuestro solo es aportar un humilde granito de arena para, de alguna manera, devolverles un poco de justicia, sobre todo, en homenaje a los que hoy ya no están, por eso se valoriza y se reivindica”, expresó Nahuel Levaggi, presidente del Mercado Central y coordinador nacional de la Unión de Trabajadores de la Tierra.
Arquitectura del horror
“El Vesubio” operó en Aldo Bonzi, en el cruce de Riccheri y Ruta N° 4, específicamente en un predio del Servicio Penitenciario Federal (SPF). Se componía de cinco hectáreas donde había tres casas, una piscina y un espacio arbolado.