Alergias y enfermedades respiratorias estacionales: ¿cómo inciden en la salud?

Ante la llegada de las sintomatologías asociadas a la época primaveral, El1 dialogó con la neumonóloga María Fernanda Jaroslavsky. Las recomendaciones para disminuir el impacto de las alergias y las medidas de prevención necesarias.

Luego de un crudo invierno en que predominaron olas de frío polar y un descenso de temperatura extremo, la llegada de la primavera trajo un alivio a gran parte de la población. No obstante, las alergias y las afecciones respiratorias estacionales propias de esta época ya se comenzaron a sentir.

En este contexto, El1 dialogó con María Fernanda Jaroslavsky, a cargo de la jefatura del Centro de Vías Respiratorias, Asma y Alergia en San Justo, quien informó que los síntomas de alergias estacionales pueden registrarse incluso antes de septiembre. En este sentido, aseguró que incluso desde mediados de julio los centros de salud reciben a pacientes con dichas patologías.

“Los síntomas pueden iniciarse mucho antes porque, en realidad, la polinización comienza de uno a dos meses antes. En septiembre inicia la polinización de las gramíneas y los pastos, que se extiende hasta fines de noviembre. En tanto, la polinización de las malezas ocurre entre diciembre, enero y febrero”, explicó.

Con respecto a la sintomatología, Jaroslavsky señaló a los estornudos, la picazón de la nariz y los ojos y la mucosidad como los más frecuentes. Asimismo, destacó que dichos síntomas se diferencian de los resfríos y los cuadros virales, principalmente, por la presencia de fiebre en el paciente.

“Muchas veces los síntomas pueden estar cruzados, pero, en general, los cuadros alérgicos no están acompañados por la fiebre. Lo que sí se puede presentar en la primavera son brotes a nivel dermatológicos, asociados con virus que circulan en esta época del año y picaduras de insectos muy presentes durante la primavera”, agregó.

El barbijo, una herramienta de prevención que llegó para quedarse

Por otra parte, Jaroslavsky destacó que la pandemia por el COVID-19 marcó un antes y un después en los cuidados relacionados con el contagio de cuadros virales e infecciosos. “El barbijo se instauró para quedarse y es importante que los equipos de salud recomienden su uso habitual, junto con el lavado de manos, la ventilación de ambientes y el alcohol en gel”, destacó.

Alergias: tratamiento preventivo para disminuir su impacto

Al ser consultada sobre las medidas de prevención para evitar cuadros de gravedad, la especialista recomendó, en primer lugar, realizar las consultas médicas con anterioridad a la estación primaveral. “De esta manera se diagnostica a qué polen es alérgico el paciente para instaurar un tratamiento adecuado”, indicó.

Además, consideró pertinente:

  • Ventilar las casas durante los períodos de baja polinización del día, es decir, evitando las primeras horas del día y las últimas de la noche.
  • Utilizar gafas de sol que cubran todo el globo ocular para evitar el contacto con el polen.
  • Mantener las ventanillas cerradas los autos.