Kicillof y Cafiero encabezaron una reunión con los intendentes para coordinar el trabajo de los comités de emergencia en los barrios

A través del trabajo coordinado entre Nación y Provincia, se busca la detección temprana de casos positivos y sospechosos en las barriadas populares para darles aislamiento inmediato y tratamiento preventivo.

Con la atención puesta en evitar que el COVID-19 se dispare en los más de 1.800 asentamientos bonaerenses, el Gobernador, Axel Kicillof, recibió este martes por la tarde, en la sede del Ejecutivo provincial, al jefe de Gabinete nacional, Santiago Cafiero, y a gran parte del equipo de ministros del Presidente Alberto Fernández, mientras que los 135 intendentes de la Provincia se sumaron a la reunión mediante videoconferencia. El motivo fue dar a conocer un protocolo de intervención en los barrios populares en el marco del Dispositivo Estratégico para Coronavirus en Territorio de Argentina (DETecTAR) que, este martes, se puso en marcha en La Matanza.

A través de esta estrategia, el Gobierno bonaerense, junto con el Ejecutivo nacional, sale a buscar, “casa por casa”, casos positivos de coronavirus en las barriadas populares para darles a aislamiento inmediato y tratamiento preventivo, y evitar, así, el estallido de la enfermedad en las zonas de más bajos recursos, como ocurrió en las denominadas villas 31 y 1-11-14 de la Ciudad, donde los contagios superan los 1.400 casos, representando el 34 por ciento de los activos, y donde se produjeron doce muertes, incluidos los casos emblemáticos de Ramona Medina y Víctor Giracoy.

En ese marco, y con la experiencia de lo ocurrido en la Ciudad, Kicillof indicó la importancia de “coordinar aun más el trabajo que se viene haciendo entre todos los niveles de gobierno para reforzar la presencia de los Comités Operativos de Emergencia (COE) en los barrios de la Provincia” y priorizar “las estrategias en red para las derivaciones inmediatas y la asistencia a la familia y a la comunidad ante la aparición de casos sospechosos”. Por eso, se conformarán comités de emergencia barriales para que las organizaciones que trabajan en territorio puedan dar alertas tempranas para evitar la propagación de la enfermedad. 

En el mismo sentido, Cafiero señaló que “la particularidad del AMBA necesita una mirada distinta” y que “el Estado tiene la obligación de realizar un trabajo más integral que no solo aborde la emergencia sanitaria, sino, también, la situación económica de las familias” de los barrios más postergados, donde la mayoría de sus habitantes se encuentran desocupados o integran el sector de la economía informal, paralizada por la cuarentena.

El protocolo de intervención en los barrios populares consiste en el despliegue de una “vigilancia activa” para hacer operativos y algunos testeos de casos sintomáticos en las villas y asentamientos ubicados en distritos del Conurbano. En esa línea, el ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés “Cuervo” Larroque, hizo hincapié en que “cada barrio de la Provincia tiene su particularidad y los COE nos permitirán caracterizar las necesidades puntuales, siempre en pos de tener una alerta temprana y una respuesta rápida para dar contención social a través de la presencia del Estado”.

Además de Cafiero, del cónclave participaron los ministros nacionales del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro; de Salud, Ginés González García; de Desarrollo Social, Daniel Arroyo; y de Seguridad, Sabrina Frederic; así como el diputado nacional y líder del bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner.

Por parte del equipo de Kicillof, estuvieron la vicegobernadora, Verónica Magario; su jefe de Gabinete, Carlos Bianco; y los ministro de Salud, Daniel Gollán; de Desarrollo de la Comunidad, Andrés “Cuervo” Larroque; de Seguridad, Sergio Berni; y de Gobierno, Teresa García. En tanto, los 135 intendentes siguieron la reunión de manera remota a través de videoconferencia.