Como Lula da Silva: un senador bonaerense busca prohibir el uso del celular en escuelas

Emmanuel González Santalla recordó que hay una iniciativa de su autoría que espera en Diputados.

Luego de que el presidente de Brasil, Luiz Inácio "Lula" da Silva, impulsara una ley que prohíbe el uso de teléfonos celulares en las escuelas públicas y privadas del país vecino, el senador bonaerense Emmanuel González Santalla, de Unión por la Patria, recordó que en la Legislatura de la Provincia hay una iniciativa de su autoría que espera a ser tratada por la Cámara de Diputados.

“Como ´Lula´ en Brasil, nosotros también entendemos que prohibir el uso de celulares en las escuelas es positivo para el desarrollo educativo de nuestros chicos”, argumentó el legislador mediante un comunicado de prensa, y señaló “la creciente preocupación de la región por el impacto de la tecnología en la educación”. Así, planteó que “es urgente que los chicos dejen de utilizar dispositivos digitales que afectan su concentración en el aula”.

Distracciones

En ese sentido, González Santalla ponderó que la iniciativa “busca reducir las distracciones y fomentar un ambiente de aprendizaje más concentrado”. Además, aseguró que “promueve la interacción cara a cara entre docentes y estudiantes y asegura que los jóvenes estén más enfocados en su desarrollo académico”.

Cabe recordar que el documento cuenta con la media sanción del Senado bonaerense desde septiembre del año pasado. “Lo que busca la iniciativa es garantizar que los estudiantes de la Provincia también puedan contar con un entorno educativo libre de distracciones tecnológicas”, resaltó el legislador.

A su vez, consideró que “se debe generar un profundo debate como sociedad sobre el uso de pantallas en niños y jóvenes”. De ese modo, alertó que el uso desmedido está “provocando graves problemas en su salud física y mental”. “Miopía, obesidad, desnutrición, sedentarismo, problemas auditivos, retraso en el habla, trastornos en la conducta, ludopatía digital, grooming y bullying, entre otros”, enumeró.