Villa Luzuriaga: robaron un auto con una beba adentro y la arrojaron en su butaca
El hecho ocurrió en las inmediaciones de Garibaldi y Alicante cuando la familia fue sorprendida por un grupo de delincuentes armados que se movilizaban en un vehículo. Por fortuna, todas las víctimas están fuera de peligro.
Una familia fue víctima de un violento robo automotor en la puerta de su domicilio tras ser sorprendida por un grupo de delincuentes en las inmediaciones de Garibaldi y Alicante, en la localidad de Villa Luzuriaga: durante el escape de la banda arrojaron a una beba que había queda sentada en su butaca adentro del vehículo.
El hecho quedó registrado en las cámaras de seguridad del vecindario. En el material fílmico se puede observar la dramática secuencia en que las víctimas son abordadas por los ladrones y, bajo amenaza, obligan a entregar el vehículo.
Tras apoderarse del rodado, emprenden la huida, pero los gritos y el pedido de auxilio alertó sobre una situación a los asaltantes: una niña había quedado en el auto, Por ello, de inmediato, abren la puerta y arrojan la butaca para, luego, darse a la fuga por las arterias de la zona.
Según pudo saber este medio, al momento, se desconoce la ubicación del automóvil y aun no se han podido identificar a los ladrones que protagonizaron el cruento suceso. De acuerdo al testimonio de vecinos, los robos en la zona están “a la orden del día”.
Asaltos “por doquier”
“Motochorros” golpearon a una maestra con un palo para robarle sus pertenencias mientras esperaba el colectivo. Delincuentes armados le sustrajeron el automóvil a una pareja y agredieron a la mujer. Tiroteos entre ladrones y policías. Robos de medidores. La lista parece interminable.
Es que, según denuncian los vecinos, los robos no cesan desde hace un tiempo. En diálogo con este medio, los lugareños afirman sentirse “impotentes” frente a estos episodios que se reiteran con frecuencia.
“Hacemos de todo para prevenir que los robos, pero nada alcanza. Estamos conectados por grupos de WhatsApp, tenemos alarmas, rejas, alambres de púa. Nos cuidamos entre nosotros, incluso le presentamos una carta al comisario sobre estos reclamos. Sufrimos mucho la delincuencia”, lamentó en diálogo con El1, Verónica, una vecina de la zona.