Matías Deane: “La culpabilidad o no culpabilidad solo puede ser apelada por la defensa”
Tras la determinación de la sentencia de Federico Schinini, el policía declarado culpable del crimen de Lucas Acosta, el juez a cargo del Tribunal en lo Criminal N° 5 dialogó en exclusivo con El1 para brindar detalles del proceso judicial. “Los doce jurados votaron por el Homicidio con exceso en el cumplimiento de un deber”, detalló.
A días del cierre del juicio por jurados contra Federico Schinini, el policía declarado culpable del crimen de Lucas Acosta, el juez técnico Matías Deane, del Tribunal en lo Criminal N° 5, que tuvo como función principal dirigir las audiencias del debate en la Sala de Juicios de la Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM), dialogó en exclusivo con El1 para brindar detalles del proceso judicial.
En relación a las alternativas que tuvo el jurado popular para determinar la culpabilidad o no culpabilidad de Schinini, el magistrado explicó: “Las discusiones giraron, por un lado, en torno a que la fiscalía y los abogados del particular damnificado, la familia de la víctima, decían que fue un ´Homicidio agravado por abuso funcional´, o sea que el policía abusó de su función de policía”.
Deane sumó que, por otro lado, la defensa decía que el policía había actuado en el cumplimiento de su deber dentro de su función y que, por lo tanto, no había ningún delito. “Digamos que había sido un hecho justificado porque se trataba de un procedimiento policial en que quien resultó víctima no había captado la orden de detención y había chocado el patrullero. Eso fue un poco sobre lo que giró el juicio y que fue sometido al conocimiento de los jurados”, explicó.
Sin embargo, los integrantes del jurado tuvieron otras opciones en la deliberación. "El homicidio simple con arma de fuego, porque el jurado podía entender que hubo un homicidio con intención pero sin abusar de las funciones; el homicidio imprudente, porque también de la prueba surgían las posibilidades de que haya habido un disparo accidental del arma; la opción de la legítima defensa, que planteó también la defensa del acusado, afirmó que el policía había sido agredido y se defendió; y el exceso de la legítima defensa. Estas fueron las alternativas jurídicas", reveló el titular del Tribunal N° 5.
Deliberación y veredicto
Tras la deliberación entre las alternativas, el jurado popular dictó veredicto de culpabilidad para el sargento de la Policía de la Provincia de Buenos Aires Federico Schinini por el homicidio del joven asesinado de un balazo en el tórax en el barrio San Alberto, de Isidro Casanova, partido de La Matanza.
“Fue una decisión unánime. Los doce jurados votaron que hubo un exceso en el cumplimiento de un deber, por eso fue el veredicto de condena”, afirmó Deane al tiempo que sumó: “En provincia de Buenos Aires, con diez votos era suficiente para arribar a la decisión, pero los doce votaron por la misma alternativa”.
Cierre del juicio
“Una vez determinada la responsabilidad del acusado por el jurado, se hace una audiencia de cesura en el que se determina el monto de la pena que se hace ante el juez, en este caso ante mí, con el fiscal, los abogados del particular damnificado y el acusado y sus abogados, y se evalúan muchas circunstancias para evaluar la pena que se va a imponer”, explicó el magistrado.
Además, indicó: “En este caso, se le dio la oportunidad de dirigir unas palabras al padre de Acosta y al acusado Schinini y luego se resolvió dictar la pena de tres años y seis meses de prisión y siete de inhabilitación especial para desempeñarse como empleado policial o de cualquier otra fuerza de seguridad pública o privada”, detalló el magistrado.
De acuerdo a lo estipulado en la ley, el juez Deane señaló que “todas las partes pueden apelar el monto de la pena si consideran que es insuficiente, pero la culpabilidad o no culpabilidad de Schinini solo lo puede hacer la defensa; ellos podrían sostener que hay que dictar un veredicto de no culpabilidad o que hay algo mal en el juicio. En el juicio por jurados, el veredicto solo es recurrible por la defensa”.
El hecho
El 4 de enero de 2024 en horas de la mañana, Isidro Casanova fue el escenario de un violento episodio de persecución y muerte: Lucas Acosta, un joven de 21 años que circulaba en un rodado Ford Eco Sport, fue abatido por un sargento de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.
Según la reconstrucción que realizaron los investigadores, un grupo de efectivos policiales habría querido identificar al ocupante de la camioneta y este se habría negado. Ante esta situación, el conductor se escabulló al barrio Puerta de Hierro.
Con el correr de las horas, los oficiales divisaron el vehículo. En esa oportunidad, nuevamente habría evadido el control, pero inmediatamente dispusieron un operativo cerrojo: un patrullero del Comando Patrulla les cerró el paso y, en el barrio San Alberto, provocó que chocaran de frente contra el móvil.
Según el relato de los policías, Acosta les apuntó con un arma de fuego, por lo que se le impartió la voz de “alto policía” y, luego, el sargento Federico Gabriel Schinini le disparó con su pistola Bersa Thunder calibre 9 milímetros reglamentaria: la bala ingresó en el tórax de la víctima y le produjo la muerte.
Sin embargo, todo cambió con el avance de la investigación. Hay puntos clave del relato de los uniformados que no le cerraban al fiscal Carlos Arribas, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática de Homicidios del Departamento Judicial de La Matanza.
Desde allí, el fiscal dispuso que Gendarmería Nacional Argentina (GNA) realice las actuaciones del caso por haber policías involucrados y que se relevaran las cámaras de seguridad ubicadas en las inmediaciones.