Caso Lucas Verón: el jurado popular declaró culpables a los dos policías por el homicidio
Se trata de los agentes Ezequiel Benítez y Cintia Duarte que el 10 de julio de 2020, durante el ASPO, mataron al joven e hirieron a un amigo tras una seguidilla en González Catán.
Tras una larga jornada judicial, un jurado popular declaró culpables de homicidio en exceso del cumplimiento del deber a los dos policías de la provincia de Buenos Aires que, el 10 de julio de 2020 mataron a Lucas Verón e hirieron a un amigo tras una seguidilla en la localidad de González Catán.
Fuentes judiciales adelantaron a El1 Digital que el viernes 19, en horas del mediodía, se realizará la audiencia de cesura, en el Tribunal en lo Criminal N°4, ubicado en las inmediaciones de las calles Entre Ríos y la avenida Arturo Illia, para evaluar las penas a imponerles a los efectivos policiales.
De acuerdo al documento al que tuvo acceso en exclusiva este medio, el 10 de julio de 2020, aproximadamente a las 1:50 hs. Ezequiel Benítez conducía un móvil del Comando de Patrullas La Matanza Sur y persiguió por varias cuadras a Verón y Aguirre que iban en una moto, hasta que los alcanzaron en la esquina de Llerena y Achega. “Con su arma reglamentaria, excediéndose el cumplimiento de su deber, le efectuó disparos ambos, impactando uno de ellos en Lucas Verón, lo que determinó su fallecimiento. En tanto, a Aguirre no lo hizo por no tener puntería”, precisaron.
Por su parte, la oficial Cintia Duarte fue hallada culpable de la imputación de exceso en el cumplimento de su deber cuando acompañaba en el vehículo a Benitez y persiguieron a los jóvenes, pero fue declarada “no culpable” por el jurado popular en la acusación de tentativa de homicidio en relación al amigo de Verón, Marcos Aguirre.
Testimonio del sobreviviente
El joven que sobrevivió a los balazos tras la seguidilla policial, Marcos Aguirre, en la que fue asesinado Lucas (18) aseguró que los oficiales no les dieron la voz de alto. Según le explicó al jurado, primero hubo dos disparos y luego otros dos cuando cayeron de la moto.
"Lucas corría adelante y yo atrás, él trastabilla y cae, lo paso y vuelvo porque no venía más", dijo el joven, quien contó que fueron al hospital y después ya lo vio a Lucas "en la camilla ya sin vida".
Antes de Aguirre, había pedido declarar el policía Benítez, quien admitió que participó de la persecución en un móvil "con las balizas apagadas" y que efectuó dos disparos porque pensó que los jóvenes estaban armados, aunque afirmó que tras el hecho se retiró del lugar sin asistirlos porque creyó que no había herido a nadie.