“Hoy me toca perder a mi viejo por nada, porque no le robaron nada”, lamentó el hijo del pollero asesinado en González Catán

En las últimas horas, Francisco, el hijo de Armando Rogelio Alegre, el repartidor de pollos de 45 años que fue asesinado en el barrio El Talita de González Catán, rompió el silencio y contó, con dolor, como fueron los últimos minutos de vida de su padre.

“Me encontré con mi viejo tirado en la vereda, sangrando, quejándose de los dolores. Lo primero que hice fue levantarlo para llevarlo al hospital”, relató el joven, quien junto a comerciantes y vecinos trasladó de urgencia a la víctima hasta el Hospital Simplemente Evita, nosocomio en que, lamentablemente, el pollero falleció.

"Yo creo que fue un intento de robo, porque (mi padre) estaba repartiendo mercadería. Yo hago reparto con él, conozco el recorrido y sé lo peligroso que es barrio”, remarcó el joven, uno de los tres hijos que tiene el repartidor de pollos asesinado.

Y finalizó: “Todos los días en la tele vemos que matan a gente trabajadora y, hoy, me toca perder a mi viejo por nada, porque no le robaron nada”, finalizó.

Dos detenidos

Tras arduas tareas investigativas, personal de la Policía de La Matanza capturó a dos de los presuntos asesinos de Armando Rogelio Alegre. De acuerdo a la información brindada por voceros policiales, los detenidos tienen 14 y 28 años y serían los autores materiales del asesinato del trabajador, cometido en la intersección de las arterias Alagón y Bariloche.

El menor, alías “Nanacho”, fue detenido en un domicilio de la calle Iberá al 7.000. El mayor de edad, conocido como “Colo”, fue apresado por la DDI local en el cruce de las calles San Matías y Céspedes.

En la causa, caratulada como “Homicidio calificado”, interviene la UFI de Homicidios y, al haber un menor implicado, el Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil del Departamento Judicial de La Matanza.