Ratificaron un nuevo paro en el Posadas para el martes

Será de 24 horas y se realizará el martes 23. Es contra el despido de 122 trabajadores y la medida será acompañada por el gremio nacional de salud FESPROSA, que convocó a sus 30 mil afiliados de 600 hospitales de todo el país a una jornada nacional de lucha con paros y movilizaciones. Además, denunciaron ataques a despedidos en las redes sociales.

Desde la Federación Sindical de Profesionales de la Salud (FESPROSA) anunciaron la realización de un paro por 24 horas en el Hospital Posadas, de El Palomar, en contra de los 122 despedidos de diversas áreas. Será el martes 23 y la medida estará acompañada por una jornada nacional de lucha en todos los hospitales del país.

"Estamos ante una grave irresponsabilidad por parte de las autoridades del Posadas, quienes elaboraron una lista de despidos con claro sentido de revanchismo gremial, echando enfermeros que trabajaban en el hospital hace entre 15 y 20 años y que son irreemplazables en su tarea. También fueron despedidos profesionales farmacéuticos y de otras áreas", planteó Jorge Yabkowski, presidente de FESPROSA.

Campaña de desprestigio a través de las redes sociales
En medio de la lucha que llevan adelante los despedidos del nosocomio nacional, una de las cesanteadas, Karina Almirón, quien se desempeña como técnica de anatomía patológica especializada en inmunohistoquímica, es decir, quien determina a través de estudios qué tratamiento se hace a cada paciente con cáncer y otras enfermedades, denunció que fue blanco de “trolls” a través de las redes sociales.

La técnica había publicado una carta abierta en la que daba cuenta de su preparación académica, de la labor que llevaba adelante en el hospital, de las condiciones de trabajo en dicho centro de salud y la lucha cotidiana del personal de salud y de los pacientes que asisten a él, defendiendo el derecho a la salud pública.

En dicho comunicado, también, detalló que, junto con ella “despidieron a enfermeros de terapia intensiva pediátrica, de unidad coronaria y de hematooncologia pediátrica”. “Están vaciando el hospital, privatizando sectores y, luego, vendrá el arancelamiento a los pacientes. En definitiva, las consecuencias del ajuste la paga el pueblo pobre. No tenemos que permitirlo. Por nosotros, por nuestros hijos, por los pacientes, porque el Hospital Posadas es parte de nuestras vidas”, planteó Almirón.

Tras sus declaraciones, surgieron comentarios en Twitter que intentaban desacreditarla y la atacaban por ser congresal de la CTA autónoma y reikista, entre otras cosas. Almirón les retrucó: “Siendo ya técnica, y al enfermarme de cáncer, elegí abrazarme a la vida de todas las maneras posibles, es así que, al tiempo que empecé mi quimioterapia, entré a estudiar psicología social y, años después, cuando necesité bajar mis niveles de estrés, estudié reiki, que es una terapia complementaria y está aprobada por OMS".

"Es evidente que, cuando los 122 trabajadores despedidos del Hospital Posadas logramos vencer el cerco mediático y recibimos el apoyo de todo el país y el extranjero, el Estado se vio obligado a poner a trabajar a sus trolls para deslegitimar y tapar nuestro reclamo", denunció la trabajadora.