Crimen del peluquero: dan a conocer los chats previos al asesinato
Los chats determinarían el móvil del homicidio en la peluquería en Recoleta. El grupo de WhatsApp del trabajo, la clave.
En las últimas horas trascendieron los mensajes del grupo de WhatsApp que tenían los empleados de la peluquería de Facundo Verdini, donde el pasado 20 de marzo, Abel Guzmán asesinó a su compañero, Germán Medina.
Mientras continúa la investigación, el juez Sánchez Sarmiento manifestó que “el móvil del homicidio de Germán Gabriel Medina se trataría de una cuestión de celos, odio y resentimiento profesional”.
Para llegar a su conclusión, el magistrado utilizó una conversación producida el 23 de febrero en el chat grupal de los empleados de la peluquería, solo un mes antes del crimen.
Esa noche, Verdini envió un video hablando a cámara y dando un mensaje a sus empleados: “Quería hacer un video hablando del tema formol. Esto va más que nada para vos, Abel. Tengo muchas quejas con los chicos. Ya me está superando este tema. ¡Prohibido usar formol! Listo, acá lo digo, acá lo dejo grabado como evidencia, no quiero más formol en la peluquería”.
Los mensajes de Abel Guzmán
Guzmán respondió: “¿Querés hablarlo personalmente mejor? Nunca sos claro. Ahora que tenés este equipo, te molesta el formol. ¿Por qué esperaste tanto tiempo para poner claro tantas cosas? No tengo problema, mañana nos encontramos y lo resolvemos, pero como corresponde. Si todo es un problema para vos, ya sabes que tenés que hacer”.
Segundos más tarde, continuó: “Te olvidas de quién sos. Siempre estuve y nunca te abandoné, y te portas así conmigo. Mañana te busco y lo resolvemos. Mañana mismo. No me gusta este puterío barato. Lo hablamos en la cara”.
Minutos más tarde, escribió Medina, la futura víctima de Guzmán: “Hasta donde yo entiendo, se hace lo que el jefe dice y, si no, patada en el tuje. Onda, ¿dónde se vio que se le hable así al que te paga el sueldo? Lo de recién sonó a amenaza. ¿Qué le pasa? Háganla corta. Ustedes son los que mandan. Si no le gusta a alguien, que agarre la puerta y listo. Muerto el perro, se acabó la rabia”.
Para el juez, el chat resulta una pieza clave para determinar el móvil del crimen. Cabe recordar que Guzmán, además de procesado, fue embargado en 40 millones de pesos, y continuará detenido.