Noviembre con motosierra: en qué sectores el Gobierno recortó recursos y subsidios

Desde su asunción a la Presidencia de la Nación, Javier Milei adelantó que la brújula de su Gobierno iba a estar orientada a lograr lo que denomina como “superávits gemelos”. Y, para conseguirlo, aplicó recortes significativos en el empleo público, en las jubilaciones y en otros sectores, principalmente, del Estado.

Así, según datos provistos por el propio Gobierno, consiguió resultados fiscales positivos en los primeros ocho meses del año. En rigor, teniendo en cuenta los datos fiscales de junio, el Ejecutivo acumula un superávit primario de 8.761.942 millones de pesos, y un superávit financiero de 1.974.900 millones.

No obstante, estos números se explican en la paralización de recursos para obras públicas, que representó la principal fuente de “ahorro”. Además, las jubilaciones y las pensiones lideraron el recorte, llegando al 25,3 por ciento de la reducción total. Pero el ajuste continúa y, entre los últimos días de octubre y los primeros de noviembre, el Gobierno precisó dónde se enfocará.

INCAA

A través del Decreto 984/2024, el Gobierno nacional modificó el Artículo 30 de la Ley de Fomento de la Actividad Cinematográfica Nacional N° 17.741, sobre los recursos al cine nacional. El objetivo es cambiar el esquema de subsidios al cine argentino, bajo criterios de “calidad, audiencia y eficiencia”.

De esta forma, para este nuevo esquema, el Ejecutivo definió cuatro puntos principales: Subsidios según recaudación en taquilla, Límites de financiamiento, Revisión de subsidios para la exhibición y Prohibición de adelanto de fondos. Esto en un contexto de fuerte crisis en el sector y bajo fuertes denuncias de desfinanciamiento del INCAA.

Transporte público

Por otro lado, el Gobierno nacional confirmó la implementación de un nuevo esquema de distribución de subsidios en el transporte público. El criterio que se tendrá en cuenta será la demanda del servicio, en lugar de la oferta, a partir de las liquidaciones de octubre. Además, se contempla la Metodología para la Construcción de Tarifas Teóricas de Referencia.

De esta manera, se van a “instruir las medidas necesarias para dotar de celeridad al proceso de redireccionamiento de los subsidios a la demanda del servicio, en lugar de subsidiar la oferta”. En ese sentido, la idea es “incrementar la participación de parámetros vinculados al uso del transporte (demanda)”, en lo que respecta a “la distribución de los subsidios”.

Foncap

Por otra parte, a través del Decreto 985/2024, el Gobierno nacional eliminó el Fondo Fiduciario de Capital Social (Foncap), debido a que se habrían encontrado “severas irregularidades” en una estructura “sobredimensionada”. Según se precisó, en el último año, se asignaron 26 empleados para otorgar 26 créditos.

La medida fue anunciada por el vocero presidencial, Manuel Adorni, que aseguró que “después de una auditoría”, se detectaron “severas irregularidades”. “Se encontró una administración sobredimensionada, que otorgaba créditos de manera discrecional y ejecutaba gastos por encima de lo necesario”, afirmó.

En ese sentido, precisó: “El 74 por ciento del total de sus gastos correspondía a sueldos y cargas sociales, con 20 millones de pesos destinados a oficinas, y 80 millones por mes asignados a sus 26 empleados, que, en el último año, otorgaron apenas 20 créditos”. “Los pagadores de impuestos no tienen por qué financiar las cajas negras de la política”, cuestionó.

Más de 33.000 despidos en el Estado

Como si esto fuera poco, días atrás, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, celebró la cantidad de trabajadores del Estado que fueron despedidos en menos de un año de Gobierno de Javier Milei. En su cuenta de X, publicó un gráfico que da cuenta de que las cesantías son más de 30.000 en el empleo público.

Según el archivo, el recorte en el Estado comprende a un total de 33.291 personas de diferentes entidades y organismos del sector público. En rigor, se trata de 20.026 empleados que se desempeñaban en la administración centralizada y descentralizada del Estado, mientras que 11.014 pertenecían a empresas públicas, y 2.251 era personal militar y de seguridad.

Además, el gráfico precisa que la mayor oleada de despidos se concretó con inmediatez, ya que, en enero, a un mes de asumir Milei, se cesanteó a 7.607 personas. El segundo golpe fuerte llegó en abril, cuando se pasó de 9.001 a 16.069 despidos, mientras que en junio la cifra creció de 19.686 a 26.626. Así, hasta alcanzar los 33.291 nuevos desempleados hacia septiembre pasado.