Envases: cuál es la actualidad y el impacto del sector en la economía

El director del Instituto Argentino del Envase (IAE), Jorge Acevedo, habló de la actualidad del sector, que explica el dos por ciento del Producto Bruto Interno (PBI) del país, genera más de 400.000 empleos en unas 4.000 empresas y mueve tres millones de dólares al año. Entre otras cosas, se refirió a los cambios que experimentó, principalmente, por el auge del delivery.

“Durante la pandemia, hubo una explosión del delivery y la industria del envase tuvo que responder a ese desafío inédito”, expresó, y añadió: El envase no solo es un contenedor, debe asegurar que el producto llegue en óptimas condiciones al momento del consumo. En ocasiones, se envasa en atmósferas controladas y con materiales impermeables al oxígeno”.

En ese sentido, indicó: “Hay materiales nuevos. En cuanto al uso, hay predominio del papel y de los plásticos. El 80 por ciento de los materiales utilizados en la producción de los embalajes de cartón, que es papel, proviene del reciclado”. “Es la rama menos problemática, al punto de que se tuvo que importar recortes para producir”, agregó.

Sobre la cuestión ambiental, señaló: “Hay que hacer varias consideraciones. El problema no son los envases, sino ver dónde van después de su uso. La adecuada disposición final de los envases, posconsumo, requiere inversiones e infraestructura que muchas jurisdicciones no encararon”. “En nuestro país hay, todavía, más de 5.000 basurales a cielo abierto”, explicó.

Por otra parte, hizo hincapié en la aparición de nuevas tecnologías en el sector: “Estoy seguro de que pronto veremos en ella el desembarco de la inteligencia artificial, que nos llevará a un estadio superior”. “Será un cambio comparable al que, en su momento, produjo la llegada de la informática a los procesos industriales”, analizó.

Las tareas y los desafíos del IAE

Con respecto a las principales problemáticas del sector y que están en la agenda del Instituto Argentino del Envase, consignó: “Estamos desarrollando un sistema de gestión voluntaria. Las empresas van a ser responsables de fomentar y dar disposición final a sus productos. Algo que va más allá de concentrarlos en depósitos luego de su uso”.

“La idea es no tener una ley que obligue, sino que sean las mismas empresas las que opten por suscribirse y reciclar sus productos posconsumo”, sumó, y aseveró: “Hay numerosos casos positivos, como en las botellas de PET con las que se hacen flejes o fibras para tejidos. Todos los envases posconsumo tienen valor”.

Asimismo, aseguró: “Lo central es generar conciencia a través de la educación, además de controlar y multar a quienes no cumplen las normas”. “Desde el IAE, participamos en capacitaciones a municipios y cooperativas. Tenemos una comisión, Envase y Medioambiente, que se ocupa primordialmente de eso, de la interacción con legisladores”.