El Gobierno fijó un nuevo salario mínimo que no llega a 300.000 pesos

Con el decreto, el salario mínimo llegará a 296.832 pesos en marzo próximo, con un aumento de apenas 9,3 por ciento.

Este jueves, a través de la Resolución 17/2024, publicada en el Boletín Oficial, el Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil estableció el nuevo sueldo mínimo. El monto, a pesar de los constantes aumentos y tarifazos en los servicios, no llega a 300.000 pesos.

En rigor, el Gobierno nacional fijó un nuevo salario mínimo de 279.718 pesos para diciembre, que incluye un ajuste bimestral del tres por ciento. Además, el monto pasará a ser de 286.711 pesos para enero; de 292.446 para febrero; y de 296.832 para marzo. Así, se totaliza una suba acumulada del 9,3 por ciento en los ingresos mínimos.

La decisión se tomó por decreto luego de que el Gobierno, las cámaras empresariales y los sindicatos no llegaran a un acuerdo en la reunión del pasado 19. Esto se debió a que, del lado de los gremialistas, se pidió un salario mínimo de 572.000 pesos, lo que representaba un alza de 110,6 por ciento, con respecto a los 271.571, 22 pesos establecidos en octubre.

Este monto distaba mucho del propuesto por la Unión Industrial Argentina, mucho más cercano al que terminaron definiendo las autoridades. Porque, desde la UIA, se planteó un ingreso inicial escalonado, que arrancaba en 278.000 pesos, en diciembre, y que llegaría a 295.000 pesos en marzo, lo que significaba un incremento en el monto del 8,63 por ciento.

Inflación y Prestación por Desempleo

De esta manera, teniendo en cuenta que el salario mínimo era de 156.000 pesos en diciembre del 2023, el aumento fijado por el Gobierno es de alrededor de 79,3 por ciento, quedando unos 40 puntos por debajo de la inflación del mismo período. Según el INDEC, la inflación en lo que va del año trepó a 112 por ciento, y acumuló 166 en la medición interanual.

La resolución, a su vez, dispuso que la Prestación por Desempleo, que alcanza a trabajadores convencionados o no convencionados a través de ANSeS, equivaldrá al 75 por ciento del importe neto de la mejor remuneración mensual en cada caso. Esto contemplando los seis meses anteriores al cese del contrato de trabajo que hizo que la persona quedara desempleada.