“El aumento de tarifas sigue deteriorando la calidad de vida de los argentinos”, critican

Desde el 1 de este mes, y tras las audiencias públicas, rige el aumento en las facturas de luz, de un 16,53 por ciento promedio, aunque es de 7,7 para los beneficiarios de la tarifa social. De igual modo, comenzó a estar vigente el incremento en el gas, que es de un 20 por ciento para el consumidor final, pero de un 41,7 para las distribuidoras.

En diálogo con El1 Digital, el titular de Defensa de Usuarios y Consumidores (DEUCO), Pedro Bussetti, consideró inoportuna la suba “teniendo en cuenta las dificultades de los argentinos para tener acceso a la canasta de alimentos”. “Las paritarias no alcanzan a cubrir el deterioro de los ingresos y, a esto, se suma un 40 por ciento de trabajadores que no está registrado”, añadió.

“En este contexto, se aplica un aumento de tarifas que sigue deteriorando la calidad de vida de millones, además de la influencia que esto tiene en los costos del comercio y de la industria, que deberán trasladar estos incrementos a sus productos”, cuestionó, y aseveró: “Esto genera una espiral inflacionaria que el Gobierno no puede detener”.

Segmentación tarifaria

Bussetti, además, se refirió a la segmentación tarifaria, que se definiría en los próximos días: “El Gobierno dice que hay un diez por ciento de usuarios residenciales que están en condiciones de absorber la quita de subsidios”. “Pero, para aquellas familias a las que se les quite el subsidio, el aumento será de 120 por ciento con respecto a lo que pagaron hasta el 31 de mayo”, precisó.

“La demora en el anuncio de la segmentación tiene que ver con las dudas que hay en el Gobierno para aplicarla, dudas en la forma de incluir y definir a ese diez por ciento que considera ricos”, indicó, y advirtió: “Hay miles de personas que son usuarios de gas natural, pero no son los titulares del servicio... va a haber miles de reclamos”. Por eso, insistió con una propuesta que planteó DEUCO días atrás: “El Gobierno les tiene que quitar los subsidios a las productoras de gas, no a la gente que trabaja”. “El año pasado, les dio 548.000 millones de pesos a diez firmas productoras”, aseguró.

La herencia de los tarifazos macristas

Por último, Bussetti recordó una de las principales problemáticas durante la gestión anterior, relacionada a los servicios básicos: “Durante los cuatro años de gobierno de (Mauricio) Macri, las tarifas de gas aumentaron 2.500 por ciento y las de luz, 3.500. Por eso, los usuarios no están pagando tarifas bajas, sino las consecuencias del gobierno anterior”.

“Muchos usuarios, todavía, siguen endeudados porque pidieron plata prestada o sacaron créditos para pagar esas facturas astronómicas”, afirmó, por lo que concluyó: “El Gobierno nacional plantea la quita de los subsidios a las casas de familia, que tuvieron que pagar la crisis económica del gobierno macrista y muchos no pudieron trabajar en la pandemia de COVID-19”.