Quita de medicamentos gratis: apenas un paliativo a una problemática grave
El director de DEUCO, Pedro Bussetti, habló con Radio Universidad sobre el cambio que comunicó el PAMI para que los afiliados mantengan la cobertura en los remedios. Qué requisitos hay que cumplir para seguir manteniendo el beneficio y el preocupante cierre de oficinas de PAMI.
Por Pedro Bussetti*
El PAMI, tras la repercusión negativa que tuvo la quita de medicamentos a los jubilados, dice que todos los afiliados comprendidos en el beneficio, es decir, que ganan hasta 390.000 pesos, no van a tener que completar el formulario. En su lugar, van a tener que pedir un turno y realizar el trámite en PAMI. En caso de que el afiliado pida más de cinco medicamentos, debe hacer el formulario que le da el médico de cabecera, incorporando la historia clínica, los tratamientos que está haciendo, etcétera.
Pero aquellos afiliados que ganan más de 390.000 pesos siguen estando excluidos del beneficio. Para mantener la cobertura, tienen que hacer un trámite social y el gasto en medicamentos tiene que superar el 15 por ciento de sus ingresos para obtener el beneficio. Es decir, este comunicado del PAMI es un paliativo que no resuelve el problema de fondo.
El objetivo del Gobierno nacional es reducir el presupuesto en lo que es inversión en la salud de los jubilados. Y este objetivo se está cumpliendo porque hoy centenares de miles de jubilados ya no tienen el ciento por ciento de la cobertura. Ya se reemplazó en varios casos por el 50 y el 80 por ciento de la cobertura. Porque no nos olvidemos de que, en junio, once moléculas o monodrogas quedaron afuera de la cobertura.
Además, hay otra medida que pasó inadvertida, que es que el Gobierno declaró muchos medicamentos bajo receta como de venta libre. Pero esta medida, que parece buena o inocente porque el afiliado ya no tiene la necesidad de ir al médico, en realidad, el medicamento pierde la cobertura del descuento.
Hay un solo proyecto de Diputados contemplando esta situación de los jubilados. Pero, en realidad, lo que se debería hacer es que el Congreso convoque al ministro de Salud para que dé explicaciones sobre esta medida, que ya perjudica a millones de jubilados. Pero esto no ha pasado.
En La Matanza
Para tener en cuenta, en el caso de La Matanza, hay 160.000 jubilados y cinco oficinas de PAMI para la atención al público. Si dividimos 160.000 por cinco, nos da 32.000 personas que deben ser atendidas por oficina.
Por eso nos preguntamos cada cuánto se darán los turnos, ya que la capacidad de atención del PAMI está limitada al personal que tiene en esas cinco oficinas. Por eso, la gravedad de la medida ameritaría que el Congreso tomara otra actitud en defensa de los jubilados.
*Director de DEUCO