Fondo Monetario Internacional y endeudamiento

El director del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz, Andrés Asiaín, analizó en Radio Universidad el nuevo período de endeudamiento de Argentina. Por qué el FMI le sigue prestando dinero al país y cómo salir del dominio político extranjero.

Por Andrés Asiaín*

Vemos las chances que tiene el Gobierno de seguir manteniendo esta política cambiaria con, básicamente, un dólar que se devaluó un uno por ciento por mes. Argentina no está generando dólares genuinamente con su comercio exterior. La única chance del Gobierno para seguir sosteniendo el dólar es pidiendo plata prestada, pero Argentina ya está muy endeudada.

Nosotros nos preguntamos por qué el Gobierno se endeudaría si hay superávit. Es decir, si se reciben ingresos por encima de los gastos, no habría necesidad de endeudarse. Sostenemos que el Gobierno endeuda al Estado porque, indirectamente, consigue dólares para que los saque el sector privado del país.

Este mecanismo consiste en que hay presiones cambiarias: los sectores privados compran dólares para fugarlos al exterior, el Gobierno no quiere devaluar y obliga al Estado a endeudarse en dólares para, luego, cambiarlos por pesos en el Banco Central. El Estado queda con sus deudas encarecidas por la suba del dólar, mientras que los sectores privados que fugaron dinero valorizan su dólar en el exterior y, luego, compran activos en remate en la economía local.

El Gobierno hizo un diagnóstico en el que determinó que todo el problema de la economía argentina radicaba en el déficit del Estado. Pero pasó la motosierra, el Estado logró superávit y los problemas en la economía siguen estando. Porque los problemas son más graves y tienen que ver con que la moneda nacional no se usa como ahorro, con la política cambiaria y otros problemas estructurales que se manifiestan en la dinámica económica y política.

De vieja data

Este problema ya se manifestaba durante el Gobierno de Cristina Kirchner, aún con el pago de la deuda. La diferencia es que, a partir de Mauricio Macri, todo se agravó con una deuda externa bestial. Y la "genial" idea de Javier Milei para pagar esta deuda es tomar más deuda.

Claramente, el Fondo Monetario Internacional (FMI) vuelve a prestarle plata a Argentina, pese al endeudamiento, porque apoya al Gobierno. El FMI se quiere asegurar que haya un muñeco que apoye a Norteamérica y no a China. Y esto genera que Argentina quede atrapada en el aura del FMI porque se toma deuda para patear deuda. Con esto, el FMI se asegura el dominio político ya que condiciona la política interna.

Cuando un país como Argentina entra en esta maraña de endeudamiento y dependencia, es difícil que un quilombo internacional le abra una ventana para escapar. Pero hay que ver cómo escala este conflicto internacional por la suba de aranceles de Estados Unidos.

*Economista y director del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO)