Alerta industrial en La Matanza: “Hay fábricas pequeñas que ya cerraron”

El mal momento que atraviesa la economía no se ve reflejado solo en la altísima inflación y en la pérdida de poder adquisitivo, sino también en la recesión: según el último informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), en marzo, la actividad industrial tuvo una baja de 21,2 por ciento, mientras que la construcción se derrumbó un 42,2.

Consultado por El1 por la situación a nivel local, el vicepresidente de la Unión Industrial de La Matanza, José Batista, dio cuenta de la gravedad de la problemática. “En líneas generales, todo lo que es pequeña y mediana industrias está pasando por una dificultad importante por falta de ventas. Casi todos los sectores registraron una caída importante en la actividad”, explicó.

“En muchos casos, no se vislumbra crecer en los próximos meses, sobre todo, en aquellos sectores de bienes de capital, lugares donde se anticipan las órdenes de compra. Estos sectores son los más preocupados porque no tienen cotizaciones ni órdenes de compra a la vista”, indicó Batista, y agregó: “Todos los comercios están con costos muy altos de luz, lo que restringe las ventas”.

Además, señaló que algunos de los rubros que presentan mayores caídas en la actividad son “la metalmecánica y el automotriz”. “Otro rubro que tuvo una baja importante es la alimentación, que debería ser uno de los que más tendría que importar porque tenemos ventajas comparativas con respecto a otros países. Evidentemente, la gente dejó de comprar ciertos alimentos”, añadió.

“Si no fluyen las compras ni el trabajo desde las grandes empresas, es difícil. El petróleo, si bien pertenece a la metalmecánica, es uno de los pocos sectores que está bien porque ya tiene colocadas órdenes de trabajo de tres y cuatro años”, consignó, al tiempo que se mostró esperanzado en “que esto se vaya regulando”.

Despidos, cierres e inflación

Como consecuencia de este presente en el sector industrial, Batista alertó que los peores resultados ya se ven en el plano local: “Con la baja de la actividad, se comienza sacando horas extra a los empleados, luego se sacan los sábados y, por último, aparecen los despidos”. “En La Matanza, hay fábricas pequeñas que ya han cerrado”, advirtió.

“Esto se tiene que regular. Tiene que haber estabilidad y buscar la forma de no seguir teniendo una inflación alta, que es lo que carcome el tejido industrial y social”, sostuvo, y concluyó: “Esto es algo que se tiene que lograr porque el sacrificio de las pequeñas y medianas industrias es alto y tiene que ser para bien”.