Entre aplausos y abucheos, el Australian Open ya tiene a sus finalistas
Jannik Sinner defenderá el título ante Alexander Zverev en Melbourne, tras la silbatina en masa contra Novak Djokovic por su retiro.
Créditos: ATP Tour
El murmullo que cayó desde las tribunas del Rod Laver Arena en la segunda semifinal del Australian Open fue tan determinante como inexplicable. Esta madrugada de viernes, el Melbourne Park fue el escenario de las semifinales del primer Grand Slam del año. Jannik Sinner y Alexander Zverev, número uno y dos del mundo, respectivamente, se disputarán el título el próximo domingo.
El sorprendente abucheo, la silbatina mezclada con algunos aplausos, Djokovic levantando las manos en agradecimiento y Sasha con la mirada atónita. Esa será la foto, al menos, hasta el partido definitorio. El alemán se quedó estupefacto cuando Novak Djokovic decidió retirarse al término del primer set, acusando una lesión muscular que arrastró desde los cuartos de final ante Carlos Alcaraz.
Hubo un set de una hora y 21 minutos que vaticinaba un gran espectáculo de tenis y que se definió en tiebreak 7-6(5). “Tuve que jugar el mejor set del torneo para ganarle estando lesionado. Es demasiado bueno”, lo elogió Zverev luego del walkover.
Sin embargo, también se mostró enojado ante la reacción negativa del público: “Por favor, no abucheen a ningún jugador cuando sale lesionado. Sé que ustedes pagaron su ticket y quieren ver buenos partidos, pero Novak lleva 20 años dándolo todo por este deporte y ganó este torneo con una rotura muscular abdominal. No merece que lo despidan de esa forma. Por favor, un poco de respeto”.
Djokovic
El serbio es el máximo ganador del torneo australiano con diez trofeos en 20 participaciones. A sus 37 años, no conforme, tiene decidido seguir escribiendo los libros de historia del tenis: “Ahora mismo estoy frustrado y decepcionado, pero este torneo permanecerá siempre en mi corazón por ser el lugar en el que mejor tenis he jugado. Seguiré intentándolo mientras sienta que puedo aguantar todo esto”.
Del otro lado, Sinner explicó desde su rendimiento por qué es actualmente el número uno del mundo: el italiano barrió en sets corridos a una de las revelaciones de las últimas temporadas y con gran futuro, Ben Shelton. El primer set fue parejo hasta el tiebreak, en el que Sinner no le dio oportunidad al estadounidense y lo cerró 7-2. A partir de ahí, olió sangre y, después dos horas y media de partido, marcó el 7-6(2), 6-2 y 6-2 final.
Con argumentos, el de San Candido ya puede decir ser el mejor tenista italiano de la historia. Con solo 23 años, es el único de su país en alcanzar el top uno (desde junio de 2024) y ya suma en su vitrina un Australian Open, un US Open y el World Tour Finals, todos en 2024. Ahora, irá por la revalidación ante el alemán, que a sus 27 años aún busca su primer título de Grand Slam tras caer en las finales del US Open 2020 y Roland Garrós 2024.