Ramiro Martínez ya es un arquero centenario

El Mono llegó a los 100 partidos con el buzo del Mirasol y se convirtió en el quinto guardavallas con mayor cantidad de presencias en el club.

Para algunos, es un número más. Para otros, la doble redondez del 100 significa homenaje, reconocimiento y vigencia. En el ambiente del fútbol, por caso, es motivo de mención especial cuando un jugador alcanza esa cantidad de partidos disputados.

¿Quién dijo, entonces, que los números son fríos? Para Ramiro Martínez, el arquero de Almirante Brown que jugó la semana pasada su encuentro 100 con el buzo aurinegro, esos ceros simulan dos ojos gigantes de calidez. De un respaldo unánime y de una permanencia altamente productiva en el arco matancero.

El marplatense arribó a Isidro Casanova a comienzos de 2019. Va por su cuarta temporada en el Mirasol, que incluyó un ascenso a la Primera Nacional, un par de récords de imbatibilidad y una lesión en la rodilla que lo obligó a estar un rato largo inactivo. También, una capitanía fugaz en este campeonato.

Si hubo un rasgo distintivo en su estadía en La Fragata fue su alta eficacia en los penales. Atajó cinco de los nueve disparos de pena máxima y, hasta el choque de la semana pasada ante Quilmes, llevaba tres desvíos consecutivos.

 “Me siento muy cómodo acá. Desde el principio… Llegué un lunes y jugué el sábado siguiente. Por eso, me encantaría quedarme muchos años en Almirante. Es un equipo muy grande y sabía la responsabilidad que da ponerse esta camiseta”, recordó el exBoca Juniors, Godoy Cruz y Estudiantes de Buenos Aires. Justamente, ante el Pincha de Caseros tuvo su estreno en el club, el 27 de enero de 2019.

La marca registrada por el Mono también lo hizo entrar en la historia selecta de la institución. Es el quinto arquero con mayor cantidad de presencias, detrás de Héctor Pistone, Marcelo Golinowski, Claudio Mele y Luis Kadijevic (el papá de Maximiliano, quien también atajó en Almirante). Y al ritmo que va, sumado a que le restan dos años más de contrato, puede ambicionar con seguir subiendo escalones.

Con buzo naranja, celeste, aurinegro o con el que lleva impreso el rostro de Guillermo Brown, el Mono no para de hacer historia. Llegó a mitad de un campeonato, le dieron las llaves del arco y no las soltó más. Lleva una estrella bordada en el pecho y fue un puntal en la campaña que arañó el ascenso a Primera.

Los cien partidos quedarán inmortalizados en una camiseta que le entregarán este martes, en la previa del encuentro con Independiente Rivadavia de Mendoza. También, en una sonrisa tan redonda como esos ceros que le decoran la espalda. Ahí va, otra vez, rumbo al arco del Fragata Sarmiento, su casa, desde hace 100 partidos.

LOS CINCO ARQUEROS CENTENARIOS

Héctor Pistone 271

Marcelo Golinowski 179

Claudio Mele 128

Luis Kadijevic 127

Ramiro Martínez 100