El Mirasol sumó otra derrota preocupante en su visita a Salta

Cuando parece haber tocado el piso, Almirante Brown siempre se las arregla para caer un poco más abajo. Cada actuación se presenta como más decepcionante que la anterior. Y este domingo, en el estadio Padre Martearena de Salta, volvió a profundizar esa caída sufriendo una derrota por 2 a 1 ante un también muy limitado Central Norte.

El mal presente del elenco salteño, que llegaba al partido tras tres derrotas al hilo y con el entrenador Víctor Riggio en la cuerda floja, invitaba a ilusionarse con una levantada del Mirasol. Pero eso nunca sucedió. Mucho más por defectos propios que por méritos del rival.

Errores infantiles que se pagan caro

Como muestras de las falencias insólitas que hoy exhibe el elenco matancero están los dos goles con los que el Cuervo le ganó el partido, casi sin esforzarse.

El primero de ellos llegó tras un córner que Agustín Bianchotti empujó con total comodidad dentro del área chica, sin que nadie pudiera al menos desacomodarlo. Y con un agravante difícil de entender: William Machado, que había perdido la pelota en la jugada previa, recuperó su posición pero dejó ir el balón por la última línea, quizás pensando que era saque de arco. Algo extraño porque había sido muy claro que la pelota había sido impulsada por un jugador de Almirante.

Luego, hubo un momento de esperanza con el empate parcial de Brown. Tras un buen desborde de Tomás Almada por derecha, Matías Belloso puso el 1-1 con un gran derechazo de media vuelta.

Pero esa ilusión de dar vuelta la historia y de traerse tres puntos de Salta se desvaneció totalmente a los once minutos del complemento, después de un error inexplicable de David Ledesma. El defensor saltó con los brazos exageradamente abiertos para despejar un lateral, pero calculó tan mal que la pelota dio en su mano y el árbitro Álvaro Carranza no tuvo otra opción que cobrar el penal que Emmanuel Giménez cambió por gol.

Lo que siguió después fue un canto a la desesperanza. Los cambios realizados por la dupla compuesta por Rodrigo Alonso y Miguel Benítez no dieron resultados y Almirante no supo cómo generar una situación de peligro en el arco defendido por Alan González para, al menos, abrazarse a un empate.

Horizonte oscuro

Con esta derrota, el conjunto aurinegro sigue hundiéndose en la tabla. Con un partido menos, se encuentra en el puesto 16 de 18, solo por delante de CADU y Talleres de Remedios de Escalada.

Lo que viene no es alentador. En la próxima fecha tendrá que enfrentar a Gimnasia y Esgrima de Mendoza, el líder invicto de la tabla. Quizás con Walter Erviti como nuevo entrenador, algo que parecía resuelto antes del partido en Salta. Aunque, luego de este nuevo traspié, nadie puede asegurar qué es lo que puede suceder.