Antes de “Argentina, 1985”: cómo se hizo “Los posibles”, el filme de Santiago Mitre con artistas de La Matanza
El mediometraje experimental, estrenado en 2013, está inspirado en una obra de danza contemporánea. Un viaje al pasado con su codirector, Juan Onofri Barbato, y los bailarines e intérpretes Jonathan Da Rosa y Lucas Araujo.
Además de su reciente largometraje Argentina, 1985 -que compite por el Premio Oscar a “Mejor película internacional”-, en la fructífera filmografía del director Santiago Mitre sobresalen filmes como El estudiante, La patota, La cordillera, Pequeña flor y Los posibles. Una característica de este último, codirigido con Juan Onofri Barbato, es que cuenta con las actuaciones protagónicas de bailarines e intérpretes oriundos de La Matanza: Jonathan Da Rosa, Lucas Araujo, Jonathan Carrasco, Alejandro Alvarenga y Daniel Leguizamón (completan el reparto Alfonso Baron y Pablo Kun Castro).
“Yo daba un taller de danza y entrenamiento físico en Casa Joven La Salle (un centro de día de González Catán). Los chicos eran parte de ese taller, donde generamos la obra Los posibles, que tuvo mucho éxito en el Teatro Argentino de La Plata. A Santi Mitre lo conocía por amigos en común, en ese momento él solo había hecho su primera peli, El estudiante. Vino a ver una función de la obra y me dijo '¡Esto hay que filmarlo! Hay que dejarlo registrado, porque lo que está pasando es algo muy especial'. Y tenía razón, tuvo mucha visión de que había que filmarla en ese momento. Ahí se sumaron La Unión de los Ríos y KM 29 como productoras, y sacamos adelante el rodaje en 14 días”, recordó Onofri Barbato en diálogo con El1 Digital.
La puesta escénica Los posibles indagaba en las imágenes que se desprendían de los cuerpos de sus protagonistas, que provenían de lugares desconocidos, que llenaban de dudas y desestabilizaban. Dicha propuesta buscaba acortar el espacio entre el espectador y el artista, intentando fragilizar a ambos, para abrirlos a una experiencia de intercambio.
“La experiencia fue increíble, de muchísimo aprendizaje para todos. Desde ese proyecto, con Santiago nos hicimos muy amigos, de hecho, después participé haciendo coreografías en otras dos películas suyas. Además, fue algo muy desafiante para los chicos, ya que la obra había sido su primera experiencia profesional como artistas, y la película fue la segunda, que se filmó con mucho rigor, con la mejor calidad que podíamos alcanzar en ese momento. Que podamos tener ese momento histórico del grupo, y de los pibes, registrado fue fantástico”, añadió Juan.
Los testimonios de los intérpretes del Distrito
Jonathan Da Rosa es un actor y bailarín oriundo de González Catán que se formó en danza junto a la compañía KM. 29. Sobre su participación en el filme Los posibles valoró: “La experiencia fue muy conmovedora, no esperaba tanta puesta en escena, tuvimos mucho trabajo por realizar, fue algo único. Lo que más me gustó fue el armado de cámaras/trípodes, todo un lío para La Unión de los Ríos, pero se la bancaron a morir, porque esa productora es una familia muy unida. Y lo que más me costó fue concentrarme bastante, por el hecho de correr de un sitio al otro, pero le puse mucha pila y salió, lo recuerdo como si fuera ayer”.
Asimismo, sobre la labor junto a los directores, destacó: “Son muy amigos míos. A Juan lo conozco desde hace mucho más tiempo, él fue el que aprovecho este compuesto loco rompiendo un escenario. Y con Santi tuvimos mucha amistad, me puso la camiseta y me dijo '¡Metéle!', y fue lo que hice, se la pasó muy bien”.
Por otro lado, el artista Lucas Araujo, que reside en Virrey del Pino, resaltó: “Me llevo la experiencia de poder estar frente a una cámara, hacer los mismos procedimientos una y otra vez, y compartir con las personas que estaban ahí. Lo que más me gustó fue eso, compartir con el equipo, reírnos, repetir y que no sea lo mismo, probar uno y otro lado. Destaco la experiencia y la profesionalidad que tenían tanto Santiago como Juan Onofri, cómo iban armando y ligando todo, y por las personas que son”.