“Argentina es uno de los países con más carga impositiva”, insisten desde CAMIMA

“Los precios de China son tan altos como en Argentina, pero, a la hora de vender al comercio exterior, sus precios son bajos porque no tienen costo impositivo”, destacó José Luis Ammaturo.

El delicado momento económico afecta mucho a las PyMEs, y la metalurgia no es la excepción. Por eso, Radio Universidad habló con el titular de la Cámara Argentina de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica (CAMIMA), José Luis Ammaturo, que señaló: “La preocupación es si vamos a competir al mundo”.

“Ya sea para competir en el mercado interno o para exportar, necesitamos igualdad de condiciones”, aseguró Ammaturo, al tiempo que aseveró: “La industria en el mundo lleva a que cada vez haya menos imposiciones”. “La carga impositiva que tenemos las PyMEs es altísima. Argentina es uno de los países del mundo con más carga impositiva”, cuestionó.

Además, mencionó que también preocupa al sector “el entramado fiscal, que es endemoniado”. “A esto se suman las cargas laborales, que no es lo que se lleva el trabajador, sino el costo laboral. Esto nos preocupa porque es lo que hace que nuestros precios sean relativamente caros en el contexto mundial”, sostuvo.

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Esfuerzo

“Si nos sacan este peso, podríamos competir perfectamente tanto en el mercado local como en el externo”, consignó Ammaturo, y aclaró: “Los industriales sabemos del esfuerzo del Gobierno para estabilizar la economía, pero no es suficiente. Hay que hacer las tareas necesarias para bajar costos y la carga impositiva”.

Por otra parte, ejemplificó su idea con China, que “si bien no es capitalista, tiene una política industrial tremendamente agresiva”. “Los precios de China son tan altos como en Argentina, pero, a la hora de vender al comercio exterior, sus precios son bajos porque no tienen costo impositivo”, remarcó.

Por último, indicó que “la economía cambió con respecto a 2023”. “Tenemos una posición distinta, con una moneda más estable y una inflación más controlada. Esto ha hecho que se ajusten precios relativos”, valoró, y concluyó: “Era muy complicado trabajar día a día cuando había cambios de normativas y de precios diariamente”.