Inflación, salarios atrasados y desempleo: las causas de una pobreza alarmante

La altísima inflación, el crecimiento del desempleo y la pérdida de poder adquisitivo de los ingresos y las jubilaciones, entre lo que provocó este presente de casi 53 por ciento de pobres.

Las políticas económicas implementadas por Javier Milei generaron una degradación del nivel de vida casi sin precedentes. El INDEC reflejó esta situación en un informe que da cuenta de que, en el primer semestre del año, la pobreza trepó a 52,9 por ciento, once puntos por encima del final del 2023. Y la indigencia no se quedó atrás y subió a 18,1 por ciento.

Por eso, el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) dio a conocer un estudio en el que analiza las principales causas que generaron que la pobreza fuera la más alta desde el 2004. La altísima inflación, el crecimiento del desempleo y la pérdida de poder adquisitivo de los ingresos y las jubilaciones, entre lo que provocó este presente.

Inflación en los alimentos

Según datos del INDEC, en el primer semestre del año, la inflación en los alimentos fue de 9,4 por ciento, un número que reviste gravedad, teniendo en cuenta que es el rubro que determina el costo de la canasta básica alimentaria y, por ende, de la indigencia. Esto se vio profundizado por la devaluación del 118 por ciento que implementó Milei apenas asumió.

Salarios atrasados

En el primer semestre, además, el salario del empleo no registrado se redujo 29,5 por ciento con respecto al primer semestre del 2023, y un 24,8 frente al mismo período del 2022. Por su parte, el Salario Mínimo, Vital y Móvil se contrajo un 28,5 por ciento frente al primer semestre del 2023, y un 28,1 contra el de hace dos años. Esto siempre quedando por debajo de la inflación.

Ingresos pobres

En relación con el punto anterior, la brecha entre los salarios promedio y el costo de la canasta básica total cambió notablemente. Porque, entre fines del 2017 y fines del 2019, los salarios pasaron de superar a la CBT en un 11,9 por ciento a quedar por debajo en un 11,4. Además, durante la gestión de Milei, se llegó al peor dígito de la serie, con un 73,6 por ciento.

Crecimiento del desempleo

Uno de los datos más alarmantes es que todos los indicadores de empleo empeoraron con el nuevo Gobierno. La desocupación trepó a 7,6 por ciento, siendo el peor valor desde la pandemia de COVID-19 y ubicándose por encima del 6,6 del primer semestre del 2023. A su vez, la tasa de empleo también disminuyó y se ubicó en 44,6 por ciento.

Planes sociales

En este apartado, se observa un aumento del 22,5 por ciento en el valor real de la Asignación Universal por Hijo (AUH) frente al primer semestre del 2023. Pero la evolución real de los ingresos de la Tarjeta Alimentar se redujeron 3,8 por ciento. En ambos casos, los montos son exiguos en comparación a las alzas en los bienes y los servicios.

Jubilaciones

Uno de los puntos más delicados es el de la jubilación mínima, que tuvo un empeoramiento de 19,7 por ciento frente al primer semestre del 2023, y del 17,2 contra igual período del 2022. Así, en octubre, la jubilación mínima será de solo 244.320 pesos. A esto se suma el reciente veto de Milei a la reforma jubilatoria, que implicaba una suba del 8,1 por ciento en los ingresos.

Caída de la actividad

Por último, se observa que los niveles de actividad mostraban una recuperación hasta el primer semestre del 2022. Y, hacia el mismo período de este año, se registró una contracción de 3,2 por ciento frente al mismo período del 2023. En rigor, sin contar al sector del agro, la retracción en el primer semestre es de 6,6 por ciento.