Descubren restos de un antiguo perro utilizado como animal de carga en la Patagonia

El hallazgo es importante para develar detalles de la relación entre cánidos y humanos y los procesos evolutivos que dieron origen a la diversidad de perros domésticos actuales.

Un grupo de investigadores del CONICET halló, en la Provincia del Chubut, los restos de un perro utilizado como animal de carga, lo que representa el primer caso arqueológico de este tipo para Sudamérica. Se trata del esqueleto de un cánido macho de entre dos y tres años de edad, con evidencia de haber sido utilizado para el trasporte de carga por las poblaciones cazadoras-recolectoras que habitaban la región.

El descubrimiento se produjo durante una campaña de excavación arqueológica desarrollada en el sureste del lago Colhué Huapi, en cercanías de la localidad de Sarmiento. Los especialistas analizaron diversas osteopatologías presentes en las vértebras torácicas, lumbares y el sacro del animal, y determinaron que dichas modificaciones son el resultado del estrés físico provocado por la carga de peso sobre la columna vertebral del perro.

Además, se recuperó material genético que permitirá conocer acerca de los perros que ingresaron en Sudamérica en el pasado y aportar a la historia poblacional genética de Canis familiaris a nivel global. “Los huesos se encontraban en buen estado de conservación, tres meses antes habíamos estado en el mismo lugar y estaban tapados", contó Eduardo Moreno, investigador en el Instituto de Diversidad y Evolución Austral (IDEAus, CONICET), a Prensa CONICET.

Asimismo, señaló que como "la cuestión del perro en Patagonia es bastante discutida", decidieron hacer una datación que les permitió saber que este animal había vivido en el siglo XVII. “Una ventaja es que teníamos una gran cantidad de restos del esqueleto, entonces pudimos hacer un análisis osteológico, osteopatológico y tafonómico en profundidad. A partir de estos análisis determinamos que era un perro macho de 19 kilos, de contextura mediana y que tenía entre dos y tres años de edad al momento de su muerte", precisó.

Finalmente, los arqueólogos plantearon que este perro, a quien nombraron como “Huachen”, vivió junto a un grupo de cazadores-recolectores en la Patagonia central y se utilizó para el transporte de objetos en los viajes o recorridos que realizaban regularmente estas poblaciones.

“El hallazgo tiene profundas implicancias en el entendimiento de los grupos que habitaron la Patagonia en el pasado. Estas sociedades tenían una alta movilidad y durante milenios trasladaron todos sus bienes a pie, por lo tanto, este estudio demuestra que los perros ayudaron en el transporte de objetos y bienes a estas poblaciones locales”, destacó Leandro Zilio, investigador del CONICET y autor principal del trabajo.