Arroyo echó al funcionario que autorizó la compra de alimentos con precios superiores a los que fija el Estado

El ministro de Desarrollo Social despidió a Gonzalo Calvo, luego de que se iniciara una investigación interna por la compra extraordinaria para comedores y merenderos en la que el exfuncionario avaló sobreprecios en aceite y azúcar. Otros 14 funcionarios dependientes de su cartera renunciaron como gesto político.

El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, echó este martes a Gonzalo Calvo, hasta ahora secretario de Articulación de Políticas Sociales, por haber autorizado la compra de aceite y azúcar a un costo superior al de los precios máximos que fija el Estado. Luego del despido de Calvo, 14 funcionarios que dependían de su secretaría y estaban a cargo de subsecretarías y direcciones asociadas presentaron su renuncia como gesto ante la polémica que se generó por esta licitación. 

La compra extraordinaria para abastecer a los comedores y merenderos ante el aumento de la demanda alimentaria por la cuarentena obligatoria había generado polémica este lunes, cuando las resoluciones correspondientes a esas licitaciones fueron publicadas en el Boletín Oficial y se comprobó que el Gobierno nacional iba a pagar 158 pesos por cada unidad de 1,5 litros de aceite de las marcas Índigo e Ideal, cuyo valor acordado en el programa Precios Cuidados es de 121 pesos. La Sindicatura General de la Nación (SIGEN), que establece precios testigo para las licitaciones públicas, ubicaba en 97 pesos el costo “acorde” para ese producto. Algo similar sucedió con el azúcar.

Si bien por indicación del Presidente, Alberto Fernández, Arroyo salió, rápidamente, a explicar cómo se había dado el proceso y adujo que el Estado nacional no había conseguido mejorar los precios y que, por la situación de emergencia alimentaria, se había decidido avanzar con la compra, Calvo fue separado de su cargo esta tarde.

El Presidente también se refirió al tema al asegurar que esa compra se había frenado y que no se iba a autorizar ningún proceso que implicara que el Estado avalara precios superiores a los que él mismo fija. En el caso particular del aceite y el azúcar, confirmó que la licitación volvió a abrirse y que las empresas que la habían ganado no serán parte de esa compulsa. Además, Fernández respaldó a Arroyo públicamente y remarcó que no duda de su honestidad y transparencia, pero le ordenó iniciar una investigación interna en Desarrollo Social, que terminó con la separación de Calvo de su función.

En ese sentido, tras darse a conocer la separación del funcionario, desde Desarrollo Social indicaron que esa decisión surgió “como primer resultado de la investigación que se inició el lunes”. “También, se va a revisar el circuito administrativo para las compras y no se descartan más cambios”, indicaron desde la cartera que dirige Arroyo.