“Abrir la importación de alimentos es destruir el trabajo argentino”, alertan
"No solo se golpea al producto argentino, sino también a las provincias productoras de estos bienes”, advirtió el titular de la Confederación Federal PYME, Mauro González.
Días atrás, el Gobierno anunció la apertura de las importaciones de algunos alimentos con la intención de una mayor competitividad que generaría una baja en los precios. Algunos de los productos que se importarán serán papa, banana, carne de cerdo, café, atún, cacao, insecticidas, pañales y shampú.
Consultado sobre la medida por El1, el presidente de la Confederación Federal PYME, Mauro González, se mostró en contra de la decisión del Gobierno de Javier Milei por las consecuencias que generará en el entramado económico y productivo: “Nos parece una locura que un país que produce alimentos tenga que importar”.
“Más aun teniendo en cuenta el rol que poseen los alimentos en Argentina, ya que es un dinamizador de las economías regionales”, afirmó. Y agregó: “Cuando se habla de producción, el desarrollo de los alimentos tiene mucho que ver en cada rincón del país. No solo se golpea al producto argentino, sino también a las provincias productoras de estos bienes”.
Además, definió la apertura como “indiscriminada porque no se les cobra ningún impuesto a aquellos productos que se importan”, lo que “destruye el aparato productivo nacional”. “El eslabón más débil del sector comercial, el minorista, tuvo derrumbes en ventas y ha comenzado a cerrar comercios en diferentes lugares del país”, alertó.
González también hizo hincapié en otra de las cuestiones que definen a la economía y que generan más preocupación: el empleo en las industrias. “El sector industrial ya comenzó con la reducción de turnos. No hay despidos masivos, pero ya se están suspendiendo trabajadores”, apuntó.
Asimismo, cuestionó otros puntos, más allá de las importaciones: “Los niveles de inflación siguen siendo altos y hay una caída de la actividad de hasta el 50 por ciento en algunos sectores”. “También golpea mucho la quita de subsidios a las PyMEs por las tarifas energéticas. Es un combo explosivo”, sostuvo.
“Camino a un abismo”
Ante este escenario, González no se mostró optimista con respecto al corto o mediano plazo si no cambia el rumbo económico: “Vemos que vamos camino a un abismo en el que creemos que cerrarán empresas y que quedará gente en la calle”. “Abrir la importación es destruir el trabajo argentino porque cada producto importado es un puesto menos de trabajo”, aseguró.
“No se sale de ninguna crisis si no es con trabajo argentino”, señaló, y concluyó: “La mayoría de los argentinos estamos haciendo un gran esfuerzo, pero no se sabe cuántos quedarán en pie. Vemos que va a haber más desocupación, más pobreza, más inequidad y que se va a seguir concentrando la economía”.