Exfutbolista de San Lorenzo negó haber participado del crimen de Rubén López
Se trata de Lautaro Iván "Taro" Carrachino, acusado junto a otro hombre por un narcocrimen ocurrido en enero de 2020. “Dijo haber estado en playa Serena”, contó uno de los jueces del tribunal en relación a la declaración.
El exfutbolista de San Lorenzo Lautaro Iván "Taro" Carrachino, acusado junto a otro hombre de haber cometido un narcocrimen en enero de 2020 cuando quisieron usurpar un departamento en la localidad de Ciudad Evita para instalar un búnker de venta de drogas, negó durante el juicio haber participado del hecho y manifestó que ese día se encontraba de vacaciones con amigos en la Costa Atlántica.
En diálogo exclusivo con El1, Franco Fiumara, uno de los tres jueces del Tribunal en lo Criminal N° 4 que preside el juicio que se está llevando a cabo en la Universidad Nacional de La Matanza reveló que, en su declaración, el imputado Lorenzo Lautaro Iván "Taro" Carrachino negó la acusación. “Dijo haber estado en playa Serena”, contó tras la audiencia.
En el proceso judicial, el exjugador de fútbol está siendo juzgado junto a Cristian Daniel "Chucky" Cruz, ambos acusados del delito de "Homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas y por el empleo de arma de fuego", que prevé la pena de prisión perpetua.
Durante su declaración, Carrachino aseguró que el 26 de enero del 2020 viajó con amigos desde La Matanza a la localidad de Sierra de los Padres, cercana a Mar del Plata, y al día siguiente a Santa Clara del Mar, donde permaneció hasta el 2 de febrero.
Para reafirmar sus dichos, el acusado explicó que durante esos días concurrió a bailar a "La Caseta" y al parador "Mute", en Mar del Plata, y que durante varias jornadas de sol asistió a la playa en el Balneario 12 de Punta Mogotes.
Durante el debate también declaró el otro imputado, "Chucky" Cruz, quien también se manifestó inocente y dijo ante el tribunal que el día en el que ocurrieron los hechos que se le imputan él había ido con su familia a la casa de su suegra porque era el cumpleaños de un sobrino y que se quedó a dormir allí.
¿Coartadas frustradas?
Durante el proceso judicial, tres testigos presenciales derribaron ambas coartadas al declarar ante los jueces que los reconocían como las personas que ingresaron al departamento donde fue asesinado López. La primera de las testigos, de quien se preserva su identidad, dijo que conocía a Carrachino del barrio y por las redes sociales y que por eso lo reconoció como una de las personas que ingresó, junto a otro hombre al que también sabía que se apodaba "Chucky", al departamento en el primer piso del Monoblock 18 cerca de la 1.40 del 27 de enero del 2020.
La mujer agregó que los delincuentes rompieron la puerta de la vivienda a patadas y que gritaban "todos al piso". "Esta casa es de mi compañero 'Secuen'. Si en dos horas no se van, volvemos y matamos a todos", fueron las palabras que recordó la testigo que utilizó Carrachino al ingresar al departamento que planeaban usurpar.
A su vez, otra testigo dijo que Carrachino regresó dos horas después de aquella amenaza al departamento y le apuntó con una pistola en la cabeza. "Lautaro (por Carrachino) me apuntó con un arma en la cabeza", aseguró el testigo, quien también reconoció al otro imputado, al que identificó como "Chucky". "Sabía que él hacía estas cosas: Te sacaba la casa y te mataba", aseguró.
El tercer testigo, también presenció el hecho y fue quien concurrió al departamento de López para pedirle ayuda, pero dijo que no pudo reconocer a la persona que disparó y mató a su vecino porque ante el primer disparo se ocultó junto al resto de su familia en una habitación.
Pedido de elevación a juicio
El hecho fue investigado por el fiscal de Instrucción de Homicidios Dolosos de La Matanza, Federico Medone, quien consideró en su elevación a juicio que "Chucky" Cruz y "Taro" Carrachino, portando armas de fuego, ingresaron a la fuerza a esa vivienda con el fin de usurparla para, luego, instalar un bunker de drogas.
Tras una primera amenaza a sus ocupantes -una joven que vivía en el lugar con su pareja y su hijo de 2 años-, los delincuentes sustrajeron una PlayStation 4, cuatro gorras de visera, una camiseta de fútbol de la selección colombiana de fútbol, 500 pesos y un morral con documentación a nombre del hijo de la mujer.
Luego, los dos hombres, a los que el fiscal identificó como Cruz y Carrachino, regresaron casi tres horas después de cometer esa amenaza, junto a otros dos que no fueron identificados, y asesinaron a López, quien también se hallaba en el departamento.