Inflación por las nubes: “En lo que es precios, agosto fue trágico”, afirman los almaceneros

Este miércoles, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que la inflación tocó el techo más alto de los últimos años en agosto, con un 12,4 por ciento. Así, se acumuló un 80,2 por ciento en los primeros ocho meses del año y un 124,4 interanual. Los alimentos fueron el rubro con mayor incremento, con un preocupante 15,6 por ciento.

Por eso, El1 se comunicó con el presidente de la Federación de Almaceneros de la Provincia de Buenos Aires, Fernando Savore, que no se mostró sorprendido con el índice inflacionario del mes pasado, el primero tras la devaluación del 22 por ciento aplicada tras las elecciones PASO: “En lo que es precios, agosto fue trágico”.

“En los primeros días de todos los meses, recibimos aumentos que suelen ser de entre seis y ocho por ciento, pero, tras las PASO, los mayoristas empezaron a cambiar los precios y el salto fue de entre 22 y 25 por ciento”, expresó, y aseveró: “Esto nos da una suba de 30 por ciento, aunque, en lo que es papel higiénico y rollos de cocina, el alza fue de 40 por ciento”.

Además, indicó: “En julio, pasó que la carne no aumentó, con lo que traccionó mucho para que el número no fuera tan alto, pero, en agosto, algunos colegas carniceros me dijeron que la carne subió un 40 por ciento”. “No hay nada, dentro de lo que es alimentos y bebidas, que hiciera pensar que la inflación de agosto fuera de, al menos, 14 por ciento”, agregó.

Con respecto a los productos que tuvieron mayor variación en sus valores, Savore precisó: “Tres meses atrás, el kilo de azúcar nos salía, de costo, 340 pesos, pero, hoy, nos sale 800, con lo que hay que venderlo a mil pesos”. “Hace tres meses, con mil pesos, se podía comprar un kilo de azúcar y un kilo de yerba, pero, hoy, se necesita el doble para comprar lo mismo”, añadió.

“Esto se escapó de las manos”

Tras la devaluación y su inmediato impacto en los precios, el ministro de Economía, Sergio Massa, anunció una batería de medidas, entre las que se destacó la entrega de una suma fija de 60.000 pesos para los trabajadores, en dos cuotas de 30.000. Pero esta decisión, al igual que otras, no serían suficientes para recomponer los ingresos.

“Temo que estos números de inflación van a seguir si las políticas no cambian”, lamentó Savore, y aseguró: “El Gobierno puede dar aumentos de sueldo y bonos, pero esa diferencia ya se sacó con lo que aumentó la mercadería”. “Esto se escapó de las manos, los argentinos casi que nos acostumbramos a vivir el día a día”, concluyó.