Berni habló sobre el crimen del kiosquero: “No fue una cuestión policial”
El ministro de Seguridad destacó que las fuerzas detuvieron a los asesinos del comerciante a poco del crimen de Roberto Sabo y dijo que el asesinato no se dio por “la política de liberar presos”, sino porque hay “un sistema que no funciona” y que genera una “degradación social muy importante”.
Tras los cuestionamientos que recibió este domingo cuando llegó a la Comisaría Segunda de Ramos Mejía por parte de los vecinos y familiares del kiosquero que había sido asesinado a tres cuadras del lugar, el ministro de Seguridad bonarense, Sergio Berni, habló sobre el hecho que conmocionó a La Matanza este fin de semana y defendió el accionar policial, dado que los dos sospechosos por el crimen de Roberto Sabo fueron aprehendidos a poco de haber cometido el delito por el que se los investiga, gracias a un operativo cerrojo. “No fue asesinado gracias a la política de liberar presos”, dijo luego para responderle al padre de la víctima.
“Yo entiendo el dolor de un padre, de todos los vecinos, porque es terrible pasar por una situación así, pero ayer no fue una cuestión policial. La Policía lo detuvo, forcejeó con el delincuente a la salida”, marcó Berni y amplió que el joven comerciante “no fue asesinado gracias a la política de liberar presos”.
“Es gracias a un sistema que no funciona, que tiene que ver con lo cultural, con lo económico... Hay un factor cultural muy importante, hay una degradación social muy importante”, consideró el ministro, en línea con lo que, más temprano, había planteado el Gobernador, Axel Kicillof.
Sobre el hecho ocurrido en pleno centro de Ramos Mejía pasado el mediodía de este domingo, Berni relató: “El patrullero estaba pasando por ahí. No es una cuestión policial en este caso, y esto no quiere decir que me esté sacando el lazo de encima”. En ese sentido, el funcionario graficó que, en la Provincia, “hay 2,1 policías cada cien manzanas”, por lo que remarcó que se necesitan “móviles, mayor capacitación y más profesionalismo”.
Según Berni, el mayor de edad detenido por el crimen “era de Fuerte Apache”, el barrio ubicado en la localidad de Ciudadela, en Tres de Febrero. “Se tomó un Uber, salió a recorrer y entró a un kiosquito con un montón de plata en la mochila para llevarse nada, casi una cuestión cultural diaria”, agregó, en alusión a que escaparon sin robarle nada a Sabo.
En tanto, con respecto a su futuro al frente del Ministerio de Seguridad, Berni no descartó renunciar tras las elecciones del próximo domingo. “Me voy a tomar 24 horas para recapacitar muchas cuestiones políticas en las que tengo muchas diferencias. Renunciar o no renunciar es indistinto, lo que importa es que el Gobierno pueda retomar el rumbo que nosotros quisiéramos que tuviera”, señaló.