“No se puede trabajar con tantos dólares distintos”, protestan comerciantes locales
Así lo expresaron a este medio desde una concesionaria de automóviles ubicada en San Justo, sobre el impacto negativo de las variaciones de la divisa estadounidense en el sector comercial. “La gente que no puede exportar tiene que comprar con sus dólares al valor del blue, por lo que siempre se nota esta diferencia entre el oficial y el blue”, aseguraron.
La economía argentina parece tener una seria vinculación con el dólar que no es netamente económica sino, también, de raíz cultural. Porque, cada vez que la divisa estadounidense muestra un aumento, el peso se devalúa, lo que impacta directamente en los precios y, en consecuencia, en los índices de inflación.
Esta situación parece afectar, sobre todo, al sector comercial. En diálogo con El1 Digital, Daniel, encargado de una concesionaria de autos de San Justo, aseguró, sobre la cantidad de dólares que opera en el mercado, entre ellos, el oficial, el blue, el CCL y el cripto: “No se puede trabajar con tantos dólares distintos”.
“La gente que no puede exportar tiene que comprar con sus dólares al valor del blue, por lo que siempre se nota esta diferencia entre el oficial y el blue, que sentimos que termina siendo el verdadero”, cuestionó, dado que el dólar solidario, hasta este martes, se ubicó en 358,88 pesos, en tanto que el blue lo hizo en 390.
Además, señaló: “Me cuesta conseguir casi todos los productos porque trabajo con importados”. “Los importadores no tienen reposición. Ahí la cadena se rompe y no llega el producto que se necesita. Esto hace que el bien se encarezca, por lo que todos los que trabajamos con productos importados estamos en un gran problema”, aseveró.
En esta línea, Augusto, dueño de un comercio del rubro de electrodomésticos del hogar de Ramos Mejía, sostuvo: “La situación está muy complicada porque, con tantos dólares distintos, todo aumenta y no solo es difícil mantener los precios, sino, también, tener un precio de referencia, tanto para los comerciantes como para los clientes”, agregó.
Por su parte, Pablo, encargado de un local del mismo rubro, pero de San Justo, expresó: “Los aumentos del dólar caen mal porque hacen que haya menos movimiento de gente y estemos más parados”. “En el último mes, los precios se nos dispararon un 80 por ciento. Hoy, vendemos las cocinas a entre 55.000 y 74.000 pesos”, añadió.
“A veces, no se pueden conseguir algunos insumos que están cotizados en dólares. En nuestro caso, esto influye mucho en productos como lavarropas y televisores”, remarcó, y concluyó, sobre una medida que podría alentar el consumo: “Estaría bueno que haya más posibilidades de crédito para que la gente pueda comprar más”.