Inseguridad sobre ruedas: “Nuestras familias lloran cada vez que salimos”, confiesan colectiveros

En plena manifestación por el crimen de Daniel Barrientos, el chofer de la Línea 620 que fue asesinado en la madrugada de este lunes en el barrio Vernazza de Virrey del Pino, compañeros y delegados del colectivero hicieron oír sus reclamos y bronca ante la inseguridad reinante en el transporte público.

“Hemos decidido tomar esta medida porque vemos que las autoridades no hacen nada a pesar de los reclamos que les venimos haciendo. La verdad para nosotros hoy es un día muy triste, a Daniel Barrientos le faltaba un mes y medio para jubilarse, tenía más de 30 años de servicio en la empresa y era una buenísima persona”, relató Antonio Petkovsek en una nota con El1 Digital.

Sobre las cámaras, cabinas y botones antipánico en los colectivos, una promesa realizada por el otrora ministro de Seguridad Provincial, Cristian Ritondo, días después del crimen de Leandro Alcaráz, denunció: “Ninguna unidad tiene cabinas y muy pocos coches tienen cámara. En cuanto a la seguridad es algo que estamos reclamando siempre, cada 15 días tenemos reuniones en la departamental de La Matanza con los jefes policiales, pero nada cambia. Ya pasaron cinco años del crimen de Leandro Alcaráz, pero vemos que sigue todo igual o peor, se ve que a los políticos no les interesa la seguridad de los compañeros porque no nos dan bolilla solo se preocupan por ellos”.

Y agregó con bronca: “Seguramente, por unos días hasta que se enfríe la cosa, pondrán patrulleros y controles por todos lados como hacen siempre, pero después no pasa nada. Hacen falta medidas ejemplificadoras, porque hoy el chorro sabe que hace algo y a los tres días está en la calle. Mientras tanto el trabajador es el único que la sufre y nosotros estamos en la calle a la buena de Dios, esa es la realidad que vivimos día a día, sobre todo a la madrugada”.

“Cada vez que salimos, nuestra familia llora”

Fabio Garzeno es chofer de la Empresa Almafuerte y se sumó a la medida de fuerza en solidaridad con sus compañeros de la Línea 620. Sobre las medidas de seguridad en los colectivos, remarcó: “las cámaras, cabinas y más seguridad que nos prometieron no se cumplió nada. En la Línea Almafuerte apenas tenemos tres o cuatro colectivos con cámaras de las cuales no funciona ninguna y nosotros siempre volvemos a los barrios porque entendemos que también nos tenemos que solidarizarnos con la gente que necesita de nuestros servicios”, expresó.

Cabe recordar que hace pocas semanas, el colectivo 622 volvió a ingresar al barrio Mugica de Virrey del Pino luego de que un chofer sea baleado durante un robo.  “Nosotros estamos cansados de esta situación, nuestras familias lloran cada vez que salimos de nuestras casas, nos dan un beso porque no saben si nos van a volver a ver con vida”, sentenció.