Aseguran que, en los últimos diez años, se duplicaron las muertes de motociclistas en siniestros viales

Desde la Asociación Civil Luchemos por la Vida confirmaron que, en los últimos diez años, a nivel nacional, prácticamente se duplicaron los fallecimientos por siniestros viales de las personas que conducen motos. Consultado por El1 Digital, Alberto Silveira, presidente de la ONG, brindó precisiones sobre este incremento y analizó sus posibles causas.

“El aumento es significativo porque, de diez años a esta parte, de constituir el 25 por ciento de los muertos en el tránsito a nivel nacional, en estos momentos los motociclistas (fallecidos) se acercan peligrosamente al 50 por ciento. Estamos en el 47, 48 por ciento, lo cual habla de la gravedad del tema”, señaló.

Al analizar las posibles causas de este incremento, Silveira planteó: “Por un lado, hay una multiplicación del número de motos, por razones fundamentalmente económicas. La gente busca tener un vehículo accesible, que no le dé muchos gastos, sin medir los riesgos que ello implica. Tengamos en cuenta que, internacionalmente, se considera que, en un vehículo de dos ruedas a motor, como puede ser una motocicleta, (un conductor) tiene 20 veces más posibilidades de morir que en un vehículo de cuatro ruedas, en caso de un incidente vial”.

“Por otro lado, el tema nodal acá es la falta de controles existente. No se controla el cumplimiento de las normas básicas de seguridad de los motociclistas: fundamentalmente, el uso del casco normalizado en la cabeza, que marca una diferencia abismal, y puede ser la diferencia entre la vida y la muerte en el caso no sólo de una colisión. También el casco puede salvar la vida en caso de una pérdida de control de la moto, o de una caída simplemente por una mancha de aceite, como ocurre muchas veces”, remarcó Silveira.

Doble responsabilidad

Así las cosas, el presidente de Luchemos por la Vida señaló que tanto el Estado como el conductor, especialmente, tienen su parte de responsabilidad en esta problemática.

“Es fundamental que aquel que asume el riesgo de conducir en moto, asuma también que tiene que poner normas de seguridad, las cuales tiene que cumplir a rajatabla para asegurar su propia vida. Y que a veces implica no solamente perder la vida, sino cosas peores, como quedar parapléjico de por vida" advirtió Silveira.

“A veces, los que andan en dos ruedas, en moto –y esto vale también para los que andan en bicicleta- sienten que las normas básicas de tránsito no son para ellos. Sienten que ellos no tienen que cumplir con las normas de circulación ni de seguridad. Eso hace que cada vez tengamos más muertos en motocicleta en todo el país”, lamentó.

Así, Silveira recordó que, además del uso del casco, algunas de las normas básica de tránsito incluyen circular iluminado, no circular de contramano, no hacer zigzag sino mantenerse derecho en el carril, avisar las maniobras con las luces de giro, entre otras.

Por último, el presidente de Luchemos por la Vida señaló la cuota de responsabilidad de parte del Estado, con una cantidad y calidad de controles deficitaria en el país. “Creo que es imprescindible que, de una vez por todas, en los temas de tránsito, el Estado asuma su papel, y en el caso de los motociclistas mucho más. Más allá del tema de prevención del delito con las motos robadas, los papeles, etcétera, hace falta lograr que cada persona que sube a una motocicleta respete a rajatabla las normas de tránsito, particularmente el uso del casco normalizado en la cabeza, no en el codo”, insistió.