“Los comerciantes necesitamos poder empezar a atender al cliente otra vez”, plantean desde los locales de indumentaria
Así lo expresó el dueño de un comercio de indumentaria ubicado en el centro de Ramos Mejía, sobre la imposibilidad que tienen estos negocios de vender mercadería en el momento, sino, únicamente, entregar algo vendido previamente por una plataforma digital. “Alivia un poco, pero no es la solución concreta”, aseguró.
Esta semana, y tras cuatro meses de espera, los comerciantes pudieron reabrir sus locales en la denominada “cuarentena intermitente” ante la pandemia de COVID-19. No obstante, para el sector, podría tratarse de un primer paso y lejos estaría de ser la salida luego de más de 120 días de estar cerrados.
Y esto se refleja más en el rubro de indumentaria. Porque, en ese caso particular, los comercios de cercanía solo pueden mostrar la mercadería al cliente, sin que éste pueda tocarla o probarla y, a ojo, llevarla a su hogar, con la posibilidad de cambiarla luego. Pero, en los locales ubicados en los centros comerciales, solo se puede retirar lo ya vendido a través de una plataforma digital.
En diálogo con El1 Digital, Diego, propietario de un negocio de indumentaria ubicado en el centro de Ramos Mejía, se refirió a la situación y consideró que “alivia un poco, pero no es ninguna solución concreta”. “Todavía falta mucho de cuarentena y esperamos poder llegar pronto a esa solución”, agregó.
“No es un cambio contundente porque el cliente necesita tener contacto con la prenda y, para eso, creemos que falta un tiempo largo. Para los comercios de cercanía ya es difícil, pero, para los que estamos en el centro, ni siquiera existe esa posibilidad”, expresó y aseveró: “Los comerciantes, de barrio o de centro, necesitamos poder empezar a atender al cliente otra vez”.
No obstante, el comerciante hizo hincapié en que la salida debe ser extremando todos los recaudos necesarios ante la pandemia: “Entendemos que hay más contagios y, posiblemente, estemos en el pico. Hoy, a diferencia de los primeros meses, todos tenemos un familiar o un conocido contagiado. Es muy difícil”.
Por último, destacó la asistencia del Gobierno nacional durante los meses de aislamiento social, como el IFE y el pago del sueldo complementario, aunque sería insuficiente: “Estamos más que agradecidos con la ayuda del Estado, pero no alcanza. Los bolsillos no dan más y cuesta describir lo mal que estamos”.