“La cuarentena va a seguir, lo que podemos hacer es flexibilizarla”, anticipó el Presidente
Fernández confirmó que el aislamiento obligatorio continuará después del 12 de abril, pero mantendrá reuniones con expertos en salud, representantes de empresas y de los trabajadores para empezar a liberar actividades. Ya se piensa en horarios escalonados para el transporte, pero las clases no volverán.
El Presidente, Alberto Fernández, aseguró que la cuarentena obligatoria por la pandemia de coronavirus que decretó el 20 de marzo pasado “va a seguir” después del 12 de abril, que era la fecha establecida para su finalización tras la extensión de la medida que se anunció a fines de marzo. No obstante, anticipó que “lo que se puede hacer es flexibilizarla” para retomar algunas actividades y evitar una paralización total de la economía.
“Va a seguir, lo que podemos hacer es flexibilizarla. Hicimos un enorme esfuerzo y no podemos perder lo que hemos hecho”, explicó Fernández sobre el criterio de su administración. Para tomar decisiones en torno a cómo se irán levantando esas restricciones, este martes, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, se reunirá con dirigentes de la CGT y referentes empresariales de la UIA y de la Cámara Argentina de Comercio, con los que el Presidente ya había mantenido encuentros, por separado, la semana pasada. Además, sumará a esa mesa de debate a los expertos en salud que vienen asesorándolo.
El Presidente, en tanto, mantendrá, desde las 17, una videconferencia con los gobernadores para analizar la situación y los pasos a seguir porque su objetivo, aseguró, es tomar “decisiones en conjunto”.
En el marco de estas evaluaciones que viene haciendo el Gobierno nacional, este lunes, el ministro de Transporte nacional, Mario Meoni, anticipó que, la próxima semana, el transporte retomará su circulación habitual en el área metropolitana, aunque la prioridad será evitar la aglomeración de pasajeros en los horarios pico. Por eso, se piensa instrumentar un escalonamiento en los horarios de aquellas actividades que volverán al trabajo.
“A partir de las actividades que se vayan liberando, vamos a ir modificando los horarios de ingreso y de salida de los trabajos y, dentro de un mismo trabajo, que se establezcan distintos niveles de horario. Esto con el objetivo de lograr un horario aplanado, sin horarios pico”, detalló el ministro durante una videoconferencia que mantuvo con los diputados que integran la Comisión de Transporte de la Cámara baja.
Para el Presidente, los primeros resultados de las medidas de aislamiento impuestas son positivos en cuanto a la mitigación del pico de contagios, pero pidió no relajarse. “Estamos sintiendo que estamos un poco mejor, y estamos un poco mejor, pero tenemos que ir con cuidado”, remarcó.
“No tenemos que hablar de terminar la cuarentena, porque no la vamos a terminar. Lo que vamos a ver es qué tipo de actividad podemos flexibilizar y eso quisiera que lo habláramos en conjunto. Lo peor que nos podría pasar es que, con esta idea que muchos alimentan de recuperar la economía, terminemos enfermando a los argentinos”, defendió luego.
En ese sentido, volvió a plantear que su prioridad es el cuidado de la salud porque, analizó, un pico de contagios también tendría graves consecuencias económicas. “Yo elijo que la economía espere y cuidar a los argentinos. Si a un fábrica entra una persona con coronavirus, lo que ocurrirá es que enferme a sus compañeros, y ahí tendremos un problema mucho mayor: más gente enferma y una fábrica que no pueda funcionar porque sus trabajadores se enfermaron”, graficó.
“Hay actividades que podemos ir pensando en levantar y otras en que se hace más difícil”, planteó sobre las decisiones que tomará en los próximos días, aunque descartó que las clases vuelvan a dictarse con normalidad. “No van a volver porque una de las cosas que debemos cuidar es que el transporte público no se llene de gente; es el canal ideal para infectar”, advirtió.
Sobre bancos y precios máximos
El Presidente, además, se refirió a algunos “errores” de gestión que se dieron en los últimos días, en relación con la aglomeración en los bancos por el cobro de jubilaciones y pensiones y la compra de alimentos para comedores con productos que superaban los precios máximos fijados por el propio Estado nacional.
En cuanto a la situación de los bancos, Fernández reconoció que “hubo un error” al no planificar que la gente se iba a volcar masivamente a las entidades, pero valoró: “En 24 horas reaccionamos”, en alusión a los operativos coordinados por los intendentes, desde el fin de semana, para mejorar la atención y evitar concentraciones masivas.
En tanto, con respecto a la polémica de este lunes por la compra extraordinaria de alimentos para comedores, en la que el Gobierno iba a pagar precios por encima de los de mercado en el caso del aceite y el azúcar, el Presidente confirmó que “todavía no se pagó” y anunció que será frenada. “Di la orden de que ninguna compra se haga sin respetar los precios máximos que el Estado fija”, aseguró, al tiempo que respaldó al ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, al asegurar que no tiene dudas de su honestidad. Por instrucción presidencial, el funcionario deberá iniciar una investigación sobre esa compra.