Giorgi pronostica un 2018 con más “cierre de empresas y despidos por goteo” en el Distrito
La secretaria de Producción local analizó el panorama productivo local, en un contexto de caída de la actividad industrial y el empleo.
La secretaria de Producción de La Matanza, Débora Giorgi, advirtió que, de cara a los próximos meses, “se ve un escenario en que crece la problemática de cierre de empresas y despidos por goteo porque las estructuras de costos están sufriendo, y mucho”.
En diálogo con El1 Digital, la exministra de Industria nacional analizó los resultados del relevamiento del Observatorio de Producción, Comercio y Empleo de La Matanza que depende de su cartera y arrojó que, en los últimos dos años, la industria local perdió 7.100 puestos de trabajo.
“Los aumentos de tarifas se están haciendo impagables porque se acumulan, cae la producción, aumentan las importaciones y suben los costos fijos, con créditos que plantean tasas de interés que resultan impagables para las empresas”, destacó.
Entre los motivos que llevan a las empresas a deshacerse de parte de su personal, o a no reemplazarlo cuando pierde parte de él por retiros o jubilaciones, Giorgi enumeró “el avance de las importaciones y la dolarización de las tarifas, combustibles y materias primas, que pegan de lleno en los costos por la demanda en caída”. “No hace falta ver más que el déficit comercial récord que tuvimos en 2017 para entender el impacto en la industria”, agregó.
En ese contexto, el mismo relevamiento detectó que, a nivel local, el promedio de caída de la actividad industrial llegó al 26,6 por ciento, aunque en algunos sectores, como el de los metales pasados y calzado, la caída alcanzó el 70 y el 53 por ciento, respectivamente.
“Esta situación de acumulación de rentabilidad negativa y caída de márgenes se van transformando en ecuaciones inmanejables y, por lo tanto, los conflictos se potencian: en enero ya se vislumbran muchas audiencias de conciliación y altos niveles de conflicto laboral”, advirtió Giorgi sobre los problemas que se desataron en distintas fábricas entre fines de 2017 y principios de 2018, como el de Rapistand, que se extendió durante más de un mes. De hecho, Producción colaboró con los 174 empleados afectados mediante la entrega de bolsones de alimentos para paliar la falta de cobro de sus salarios.
“No hay créditos disponibles para las PyMEs a tasas que no signifiquen una estafa y tampoco están disponibles las líneas productivas del Banco Central que les permitían a las empresas comprar maquinaria y reconvertirse, entonces no hay mucha salida ni alternativa”, observó.
“La Matanza es un municipio con una potencialidad y diversificación productiva tremenda, pero, dado este contexto de políticas de desindustrialización, está sufriendo demasiado y las perjudicas, especialmente, son las PyMEs”.