Sin novedades y una deuda que crece, los trabajadores de Rapistand ya piensan en una cooperativa
El principio de acuerdo al que habían llegado con la empresa se cayó porque no hubo nuevos pagos para saldar la deuda que, de acuerdo a los empleados, llega a los 40.000 pesos por persona. “Estamos empezando a ver la posibilidad de que Rapistand se salve por los trabajadores”, aseguraron.
A tres semanas de iniciado el conflicto en las tres plantas que Rapistand tiene en La Matanza, se recrudeció la situación de sus 174 trabajadores: la línea de diálogo que se había abierto con la empresa se cerró y no volvieron a recibir ningún pago. En total, en las últimas semanas, la firma solo depositó 4.000 pesos a cada empleado y la deuda ya llega a los 40.000 pesos por trabajador, según sus cálculos. Este jueves, un grupo se reunió con la titular de la Secretaría de Producción local, Débora Giorgi, y ya evalúan la posibilidad de la autogestión.
“Si bien veníamos hablando con los socios, no nos volvimos a comunicar desde el martes. La línea de diálogo se cerró porque ellos pretendían que dejemos el paro y volvamos a producir, pero sin la plata que nos deben”, explicó a El1 Digital Diego Newell, delegado de los trabajadores. La última oferta “consistió en otorgar 2.000 pesos por semana, pero la gente quiere su plata”, alegó. Vale destacar que a la deuda original, que consiste en el medio aguinaldo, la segunda quincena de diciembre y un bono de 2.000 pesos, ya se agregó la primera quincena de enero.
Las tres plantas, ubicadas en San Justo, Villa Luzuriaga e Isidro Casanova, están paralizadas desde el 2 de enero. Si bien en Isidro Casanova, esta semana, los trabajadores habían decidido levantar la medida, Newell adelantó que es inminente que la retomen ante la falta de respuestas de la empresa.
En la reunión con Giorgi, los damnificados plantearon los problemas que atraviesan y dialogaron sobre las alternativas a futuro. “La empresa nos había dicho que estaba gestionando un crédito a través del Municipio para reconvertir la firma y que sea rentable, pero nos dijeron que no es así. También, pedimos que intercedan ante Edenor porque no están pagando la luz y ya hay pedido de corte para las tres sedes, y por suerte se está haciendo. También nos están ayudando con bolsas de comida y asistencia para los compañeros”, relató Newell.
Desde la cartera de Producción indicaron a este medio que la reunión fue “de las que, habitualmente, se tiene con los trabajadores de empresas en crisis”. “Cuando tomamos conocimiento de estas situaciones, tratamos de reunirnos con los empresarios y trabajadores para estar a disposición”, plantearon.
Por su parte, Newell agregó que una de las alternativas es que los trabajadores tomen el control de la firma. “Estamos empezando a ver la posibilidad de que Rapistand se salve por los trabajadores, y podríamos formar una cooperativa ante esta negativa de la empresa. Pero son todas cosas a evaluar”, contó.
Por lo pronto, un abogado en representación del sindicato, la UOM, empezará a interceder en el caso en los próximos días. “Lo vamos a encarar legalmente porque hasta acá llegamos, no nos aportaron una moneda más y estamos desesperados”, dijo Newell.