Avanza la instalación de medidores prepagos de luz en La Matanza
Edenor está implementando esta modalidad en cuatro barrios del Distrito para bajar la morosidad y evitar conexiones clandestinas.
En los últimos meses, Edenor, la empresa distribuidora del servicio eléctrico en la parte norte de Capital Federal y del Conurbano bonaerense, comenzó a instalar medidores prepagos en los barrios Los Ceibos, de González Catán; y Oro Verde, Esperanza y Sarmiento, de Virrey del Pino, según confirmó a El1 Digital el vocero de la empresa, Eduardo Mirabelli.
De acuerdo a la distribuidora, el objetivo es compensar las pérdidas de energía que se dan por las conexiones clandestinas y bajar los niveles de morosidad. “La idea es darles una opción a quienes están fuera de la ley y cometen una ilegalidad al robar energía. Lo pensamos para grupos sociales con ingresos económicos no regulares, para quienes es una herramienta ideal porque pueden ir comprando energía en la medida de sus posibilidades”, analizó Mirabelli.
“Así, se evitan los inconvenientes de no poder pagar las facturas y que les corten el servicio”, agregó el vocero, quien también aseguró que “la instalación es a voluntad del cliente y, en el 99 por ciento de los casos, la experiencia ha sido exitosa”.
Cuando los usuarios acceden a la instalación del medidorprepago, Edenor les otorga 150 kWh gratuitos. Una vez consumidos, los clientesdeben realizar recargas para volver a tener “crédito” disponible. Con unsistema similar al de la tarjeta SUBE, los comercios minoristas brindan elservicio de recarga y otorgan un comprobante con un número que luego losconsumidores ingresan en sus dispositivos.
“Como son electrónicos, los clientes pueden saber en todomomento cuánta energía les queda y cuánto están consumiendo en cada momento deldía. Hasta pueden configurar el sistema para que suene una alarma cuando estáncerca de quedarse sin carga”, explicó el vocero de Edenor.
Lo cierto es que, si bien hay casos en que clientes con medidores tradicionales optan por cambiar al servicio prepago, en la mayoría de los casos la instalación surge por sugerencia de Edenor. “A quienes están colgados los detectamos en operativos con cuadrillas técnicas, les explicamos que es un delito y les ofrecemos la alternativa de la instalación del medidor prepago, que es gratuita”, explicó Mirabelli.
Críticas y dudas
La instalación de este tipo de medidores forma parte de una prueba piloto que Edenor implementa desde 2006, según relató Mirabelli, y la empresa está a la espera del marco regulatorio del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), que podría salir en las próximas semanas.
En ese sentido, las asociaciones de defensa del consumidor tienen posturas críticas con respecto a este tipo de servicio porque “se están instalando por fuera de una reglamentación específica”, planteó Pedro Bussetti, presidente de la entidad Defensa de Usuarios y Consumidores (DEUCO). “La luz es un servicio público y el Estado debe garantizar su acceso universal, entonces motivos económicos ajenos a la voluntad del usuario, como son la pobreza y la vulnerabilidad económica, no deberían ser una restricción en el acceso”, apuntó.
Para el titular de DEUCO, “que se deje de prestar el servicio a una familia que no llega a juntar cien pesos para hacer una recarga es una barbaridad, porque es el Estado el que tiene que garantizar ese acceso”.
Y, a pesar de que la tarifa social rige para este tipo de usuarios como para los que tienen medidores tradicionales, Bussetti consideró que “es insuficiente”. “Los barrios donde se están instalando los medidores son los de mayor consumo eléctrico porque, como no tienen agua, usan bombas, y, como no tienen gas, usan estufas eléctricas. Entonces el consumo bimestral puede ser de 1.000 o 1.5000 kWh”, graficó.
La tarifa social establece que los primeros 150 kWh consumidos son gratuitos y “si el excedente es menor al consumo de 2015, se cobra a un costo más bajo, pero si supera ese nivel, se cobra a tarifa plena”, dijo Bussetti. “Por ende, es muy probable que, en algún momento del mes, esos usuarios no lleguen a cubrir ese gasto y se queden sin energía. Y eso es algo que debiera atender el Estado”, cerró.